Capítulo 11. Pasado

4.8K 483 114
                                    

Nota: Me siento muy orgullosa del Katsuki de este capítulo en serio, ojalá así me saliera siempre xD. Pd. Este capítulo tiene un alto grado de misoginia y es el más largo de la vida.

.

.

.

Durante los meses siguientes las cosas en el harem estuvieron en paz, al menos relativamente. Camie desapareció sin decirle a nadie, aunque todos estaban tranquilos pues los maestros aseguraban que ella estaba perfectamente bien, de ser el caso contrario ellos simplemente se negarían a dar explicaciones. Mina volvió poco después de eso con la maravillosa noticia de que estaba en espera de un bebé. Sero, el capitán de los ejércitos del sultán, no cabía de la felicidad y se paseó durante una semana por el palacio diciéndole a todo el mundo "Voy a ser padre, por cierto" esperando que todos le devolvieran felicitaciones, dejó de hacerlo cuando las personas comenzaron a responder "Ya, ya lo sé".

Kokomi no paraba en el harem y los omegas que la atendían decían que estaba muy tranquila, no gritaba ni regañaba.

Izuku cada vez podía hacer menos cosas por sí mismo, su estómago estaba enorme y la espalda le dolía terriblemente. Sin embargo, la cuestión que afligía a todo el mundo en el harem no era su fecha próxima a dar a luz sino más bien los nuevos aposentos. El sultán había tenido la intención de otorgarle aposentos reales. De vista a su jardín privado estaban dos aposentos, uno conectado solo por la vista del balcón y el último y más grande no solo tenía vista desde su propio balcón sino además acceso directo al jardín y a los aposentos de su majestad, estos eran los designados para la persona que se volviera esposa o esposo legítimo del sultán, es decir, aquella persona que estuviera unida al sultán por el juez, Haseki sultán era el título oficial, la cuestión era que, a la fecha, tal persona no existía.

Kokomi había recibido el grado de esposa, pero solo se lo había otorgado el sultán como se lo podría dar a cualquier otra concubina, más no lo era de manera oficial. Por otro lado, si bien Izuku daría a luz al primogénito de la dinastía Zalamí en el reinado de Katsuki eso no lo volvía esposo legítimo, cuanto mucho le daría el rango de concubino y esposo si el sultán decidía otorgárselo. Sin embargo, a Katsuki la tradición del palacio no le importó, mandó a remodelar los aposentos reales para Izuku cuando entró en su sexto mes y cuando Mitsuki se enteró ambos tuvieron una acalorada discusión por los aposentos.

El conflicto se mantuvo durante tanto tiempo que Izuku llegó al octavo mes y aún permanecía en los aposentos de las favoritas. Al final el propio Izuku, atemorizado por la sultana madre, acudió al sultán para asegurar que los aposentos no le importaban y que aceptaría cualquiera con tal de que ya no peleará más con su madre. Katsuki aceptó entonces darle aposentos "apropiados".

En compensación Katsuki le permitía a Izuku pasar las tardes en su terraza y compartir las comidas con él, situación que abrió muchas bocas pues ni siquiera la madre sultana compartía tantas tardes con su hijo. Era precisamente en una de esas tardes cuando ambos estaban sentados en el gran sofá, mientras Izuku comía uvas verdes Katsuki se encontraba inclinado sobre la pequeña mesa de té, con la mirada fija en el mapa que siempre usaba para repasar las cruzadas y jugueteaba con piezas ovaladas de cuarzo azul con los que marcaba la posición de sus fuerzas.

Izuku sintió curiosidad después de pasados algunos minutos.

-¿Ocurre algo, mi señor?

Katsuki pareció volver a respirar, dejó las piezas de cuarzo en una esquina de la mesa y se recargó en el respaldo del sofá.

-Quiero conquistar el reino de Bitchu, -él comenzó a señalar con el índice algo en el mapa, cuando Izuku se inclinó para mirar vio una región cercana a la frontera noroeste, entre el territorio de Zalama y la península Fuhanken, justo en el paso más cercano al mar y aunque era relativamente pequeño estaba rodeado por una gruesa línea café que parecía haber sido repasada varias veces.

El Sultán (KatsuDeku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora