Capítulo 5:

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«¿Amigos?»

DARIEN:

—¿Y bien? ¿Ya me van a responder? —insistió esa bella mujer, a la que he conocido desde la infancia. Una mujer que no había visto de nuevo, desde que me brindó un gran apoyo cuando falleció mi madre.

—¿Mich? ¿Qué haces aquí? —pregunté, y con esa sensualidad que la caracterizaba, caminó hacia nosotros, saludándonos a ambos con un ligero beso en cada mejilla.

—¿No sabes en qué fecha estamos? —fruncí el ceño, y miré a Andrew, pidiendo silenciosamente su ayuda, pero antes de que me respondiera, ella resopló. —"Pasarela de otoño" ¿Eso les dice algo, bobos?

—¡Ah, ya! Cierto, cierto. ¡Qué despistados somos! —rodó los ojos.

—¿En qué planeta vives, Dariencito?

—En el planeta Serena... —susurró Andrew en modo burlón, a lo que yo lo miré mal. Pues Mich no conocía esa parte de mi historia. Esa vez que vino a darme consuelo, no hablamos mucho de nuestras vidas. Había estado pocos días en Las Vegas, debido a su apretada agenda, y en lo poco que convivimos solo nos enfocamos en el luto por el que estábamos pasando. Así que, siendo sincero, no quería que se enterara de la existencia de mi novia. Al menos no por el momento, ya que ya conocía cómo era de intensa y entrometida. Y no tenía tiempo para darle explicaciones. Pues de no ser porque ya prometí cenar con mi padre, sino ya hubiese viajado a la dirección que mi amigo me había conseguido.

—Bueno, ¿Ya me dirán quién es ella? —volvió a insistir. Pero yo, tratando de desviar la conversación, alboroté cariñosamente sus cabellos, recibiendo un nuevo resoplido. Pues había hecho lo que tanto le molestaba. —¡Darien! ¿Cuántas veces te diré que odio que hagas eso? Maltratas mi precioso cabello. ¿Qué no ves? —reí.

—Aww. Lo siento. Siempre lo olvido —hizo un gesto lindo de falsa molestia con la nariz, mientras comenzaba a cepillar su cabello con los dedos.

—¡Eres un tipo fastidioso! —Michiru, o Mich, como solíamos decirle todos, era una vieja amiga. Hija de un buen amigo de papá, y ahijada de mis padres. Motivo por el cual prácticamente crecimos juntos, llevándonos bien, gracias a que teníamos la misma edad. Fue exnovia, por un breve tiempo, de mi mejor amigo. Un asunto que fue complicado, cuando Andrew se enamoró de Lita. Pues Lita antes solía ser muy celosa e insegura. Y claro que cuando se enteró de que la exnovia de mi amigo era una modelo bellísima, pues se armó la bronca entre los tres. Pero por suerte, ambas lograron limar asperezas. Incluso Mich se supo ganar su amistad a la buena, y ahora se llevan más que bien. Y es que, además de ser hermosa, ser gentil y empática, era algo que la personalizaba. Aunque muchos dijeran tonterías de ella, que por supuesto eran mentiras porque en nada la describían; No la había vuelto a ver desde que pasó lo de mi madre. Y es que siempre vivía ocupada viajando. Pues era una modelo de talla internacional. Y como ya lo dijo, estaba de vuelta en la ciudad, porque en unos días se celebraría el desfile de otoño. En donde ella era la modelo principal. Como sucedía siempre.

—¿Vas llegando?

—Sí. Vine sin esperar encontrarte, la verdad.

—Bueno, pues ya viste que sí estoy aquí —sonrió y de modo elegante tomó asiento en una silla delante de mi escritorio.

—¿Qué tal les está yendo? ¿Cómo está mi padrino?

—Él está bien. No te preocupes —me miró fijamente.

—¿Y tú cómo estás? —me murmuró con dulzura y seriedad, pues sabía que lo preguntaba por la tristeza que me embargó por lo de mamá. Así que, tratando de tranquilizarla le sonreí.

ATRAPADA POR EL AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora