Capítulo Once

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·ラグナロクの記録

-Gods and Monsters-

·神々と怪物

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Los dioses continuaron mirándose intensamente el uno al otro con la malicia estaba presente en sus miradas. Mientras observabas a los dos dioses en silencio, sin saber que más hacer.

—Vaya, vaya~— Loki apretó los dientes—. Realmente sabes como irritarme~.

Buddha no dijo nada, sus ojos azules aburridos miraban al dios más bajo, molestando visiblemente al dios de cabello verde. Una sonrisa presumida llena de energía hostil estaba presente en las facciones de Loki.

Buddha sacó una piruleta de su bolsillo, quitándole el envoltorio de un mordisco. Observando a Loki con un toque de diversión en sus ojos azules mientras escupía el envoltorio al suelo.

El dios nórdico apretó el puño, con su rostro retorciéndose de ira. Buddha se metió la piruleta en la boca, haciendo un sonido de estallido junto con ella. Con eso, Loki tuvo suficiente, saltando hacia el otro dios, con la ira presente en su rostro.

—Loki no- — gritaste con los ojos muy abiertos, tratando de detener al dios enojado. SIn embargo no sirvió de nada.

Loki y Buddha comenzaron a pelear mientras observabas con horror la situación. El dios de ojos azules esquivaba los ataques de Loki sin sudar, antes de enviar un puñetazo directo a la cara de Loki, haciendo que este volara hacia atrás.

Jadeaste sorprendida, poniendo una mano sobre tu boca. Tus ojos se movían de un lado a otro entre los oponentes. El tiempo pasaba mientras ambos dioses continuaban sufriendo heridas menores.

Pero ya has tenido suficiente.

Corriendo hacia ellos, extendiendo tus manos en su dirección.

—¡He dicho que paréis, maldita sea!— gritaste, mientras tonos rojos salían de tus manos.

Los dioses observaron los ojos muy abiertos por tu repentina acción. Loki salió repentinamente disparado hacia un lado, estrellándose contra la torre. Los ladrillos y adoquines cayeron al suelo por el impacto, y el polvo saliendo disparado por todas partes.

Buddha lo esquivó, haciéndose un solo rasguño en la mejilla. Tus ojos estaban cerrados mientras respirabas pesadamente, pero tus ojos se abrieron al darte cuenta de lo que acababas de hacer.

Tus ojos se dirigieron hacia donde se encontraba Loki. Un fuerte jadeo salió de entre tus labios cuando viste que el dios yacía inerte junto a los escombros que habían caído.

—¡Loki!— gritaste, corriendo hacia él. La sangre goteando por su cabeza, una mirada aturdida se posó en su rostro.

—¡Oh, dios!— entraste en pánico—. ¡Lo siento mucho!— te deslizaste hacia Loki, colocando tus manos en las suyas.

Loki te miró confundido, todo estaba borroso para el pobre dios. Una sonrisa tonta se apoderó de su rostro mientras te miraba perezosamente.

—Wow, tengo tanta suerte de ser visitado por un hermoso ángel~— las palabras de Loki salieron arrastradas mientras se atropellaban un poco entre si.

Sentiste como tu rostro se calentaba con esas palabras, posando la palma de su mano sobre tu mejilla, tirando tu capucha con ese gesto.

—Vamos, tienes que ponerte en pie— murmuraste, ayudando al dios a ponerse en pie. Loki se aferro a ti, enterrando su rostro en tu pecho.

—Tan suave~— arrulló, tropezando como si estuviera borracho. Sentiste tu rostro en llamas, sin embargo, no dijiste nada.

Tus ojos se movieron hacia el otro dios presente. Jadeando al ver la pequeña herida que tenía en el rostro.

—Pero- — Buddha te interrumpió, quitándose la piruleta de la boca, metiéndola en la tuya. Tus ojos se abrieron por la sorpresa.

—No te estreses por eso— Buddha sonrió, pasando el pulgar por su herida, retirando la sangre que corría por su mejilla—. Además, eso que acabas de hacer fue bastante sexy, me gusta.

Buddha lamió la sangre que cubría su dedo, mientras lo mirabas con la boca abierta. El dios de ojos azules rio entre dientes, claramente divertido por tu expresión. Loki hizo mas firme el agarre sobre ti, mirando al otro dios.

—Ella es mías~— se quejó Loki. Buddha se burló mientras lo miraba.

—Vamos a llevarlo dentro— Buddha refunfuñó—. Oficialmente se ha vuelto loco.

Reíste ligeramente, sintiendo el dulce sabor de la piruleta bailando en tu lengua. Lazaste uno de los brazos de Loki sobre uno de tus hombros mientras Buddha tomaba el otro.

—¿Nos vamos de excursión?— Loki preguntó emocionado mientras tu y Buddha continuabais arrastrándolo.

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—Loki, tienes que comer— le regañaste. tratando de empujar la cuchara en la boca del testarudo dios.

—No. ¡Sabe mal!— gimió Loki a modo de queja, evitando la cuchara—. ¡No lo quiero!

Suspiraste derrotada. 

—Bien, supongo que le daré de comer a Buddha en tu lugar-

Loki rápidamente metió la cuchara en su boca, haciendo una mueca por el sabor. Sofocaste una risa mientras seguías alimentando al dios. Buddha, quien estaba en la puerta, te miró con una sonrisa en el rostro.

—Todavía puedes darme de comer— habló Buddha mientras te guiñaba un ojo—. Darling~.

Tus labios se fruncieron en una fina línea nerviosa por sus palabras. Loki hizo un puchero como si fuera un niño pequeño al ver tu reacción.

—(Y/N)~— sentiste como todo tu cuerpo se helaba al escuchar esa familiar voz.

Tus ojos se dirigieron lentamente hacia la puerta, tragando saliva al ver allí a Brunhilde, mirándote fijamente con sus hipnotizantes ojos verdes.

—O-oh, hola Brunhilde— dijiste, enviándole una sonrisa nerviosa.

—Finalmente te he encontrado— la voz fría de Brunhilde resonó en la habitación, con sus ojos verdes brillando—. Amor.

Gods And Monsters - Record of RagnarokDonde viven las historias. Descúbrelo ahora