ᯓ★ 𝐀𝐃𝐎𝐑𝐀𝐁𝐋𝐘 𝐆𝐑𝐎𝐒𝐒 ── 𝐗𝐢𝐚𝐨𝐚𝐞𝐭𝐡𝐞𝐫 (𝐀𝐔) ✿‧

XIX

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𝐭𝐡𝐢𝐧𝐠𝐬 𝐟𝐫𝐨𝐦 𝐭𝐡𝐞 𝐩𝐚𝐬𝐭

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»•» ♡ «•« Me quedé bastante tiempo más junto a mi hermana, estuvimos hablando de algunas cosas y acabé contándole todo lo que había pasado con Aether en su casa.

–Entonces.. ¿Tú y él estáis..?

Asentí mirando hacia otro lado, no me gustaba admitir algo como eso tan a a la ligera.
Más bien porque era algo muy pero que muy nuevo para alguien como yo y eso Ganyu lo sabía.

–Dioses.. es una gran sorpresa.– soltó una leve risa hundiendo su cabeza un poco más en la almohada.–Me alegro mucho, se ve que es un buen chico.–

Sonreí de lado recordando lo adorable que era el rubio, no era para nada justo que fuera así; más bien porque mi estabilidad dependía de ello actualmente.

De repente, recordé las palabras de mi padre, "estoy decepcionado" , decepcionado.. tal vez me había despistado demasiado con todo este tema de Aether, tal vez no era la mejor opción lo de empezar una relación a estas alturas.

Más bien porque tenia miedo, y aún que jamás lo aceptaría en voz alta, me daba miedo depender de él y que en algún momento se canse de mi o mucho peor, que la relación con mi padre empeorase y mi vida decayera por una distracción tan grande como esta.

¿Realmente salir con alguien ahora era lo más óptimo?

Ni idea, pero me daba miedo la respuesta.

Unos golpes en la puerta me sacaron de mis pensamientos y me hicieron girar sobre mi silla para mirar hacia allí.

–Xiao.. el tiempo de visitas ha terminado, vamos a casa.– era Hu tao, parecía realmente decaída. Ni siquiera miraba al frente, solo al suelo como si fuera lo más interesante del mundo en ese mismo momento.

Miré instintivamente a Ganyu y vi la incomodidad en su mirada; ambas estaban pasando por un momento difícil.

No, todos estábamos pasando por un momento difícil.

Suspiré y apreté mis labios.

–Descansa hermana, mañana vendré a verte de nuevo.– mi voz suave hizo que ella sonriera y cerrara sus ojos.

–Bien..

Con el corazón apretujado, caminé hacia la puerta y salí de aquella fría y solitaria habitación; ahora venía la peor parte, volver a casa.

Hu tao caminaba a mi lado mientras Childe y Zhongli iban unos pasos delante nuestra, iban en silencio como todos en el hospital realmente.
Podía admitir que era la primera vez que el silencio me incomodaba.

Mi teléfono vibró, dando indicio de que alguien me había mandado un mensaje. Lo saqué de mi bolsillo y al ver el nombre del rubio fruncí el entrecejo.

No era el momento más oportuno para responder, ni siquiera de hablar con él. Necesitaba pensar, meditar sobre exactamente dónde me había metido.
Porque si, me había metido en un embrollo demasiado grande.

Salimos del hospital y yo fui directo hacia mi coche, mi padre no se dignaba ni siquiera a mirarme, así que tampoco quería darle el dolor de cabeza de simplemente tener que verme.
Ni me despedí, ni hice nada. Solo me metí en mi coche y conduje hasta mi casa.

Comenzaba a sobrepensar y no me haría ningún bien hacerlo.

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