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Jungkook, muchas veces, se levanta de mal humor.

En especial, si ha tenido un entrenamiento muy intensivo que le haya dejado los músculos adoloridos, o si ha tenido que quedarse hasta tarde haciendo algún trabajo, o incluso si simplemente tiene que levantarse demasiado temprano para ir a algún sitio. No le importa demasiado madrugar, siempre y cuando no tenga que salir de casa.

Pero, este miércoles, Jungkook se levanta fresco como una rosa; cargado de alegría y con una sonrisa en los labios que parece ser imborrable. Toda una bola de luz y color, a diferencia de como suele ser la mayoría del tiempo.

Y es que, ¿cómo no va a estar contento con la de avances que ha hecho últimamente? La vida le sonríe, y Jungkook le devuelve la sonrisa con ganas.

Taehyung parece estar empezando a confiar en él lo suficiente como para no intentar matarlo con la mirada cada vez que lo ve, e incluso ha accedido a hacerle compañía de vez en cuando en la piscina. Jungkook sigue pensando que debe de tratarse de algún tipo de sueño del que todavía no ha despertado, porque el estar pasando tanto tiempo con Taehyung suena demasiado utópico.

Además, el equipo va bien y sus estudios también, así que no tiene demasiado de lo que quejarse realmente.

Aunque quizás sí debería quejarse de algunas cosas, empezando por sus amigos; porque todo lo bueno que alguna vez puede haber dicho de ellos está a punto de retirarlo cuando llega a su taquilla y Mingi se dedica a, durante aproximadamente diez minutos seguidos, recalcarle lo indignado que está de que que Jungkook no le haya contado nada sobre lo que pasó en la piscina con Taehyung (Mingi parece esperar más que una conversación amistosa por respuesta, y el azabache tiene el presentimiento de que va a decepcionarlo enormemente cuando se lo cuente)

Y, por si fuera poco, San aparece cinco minutos después, con su expresión gruñona de siempre, y decide unirse también. Porque, al parecer, Mingi y San son el dúo perfecto cuando se trata de molestar a Jungkook. Con amigos como ellos, ¿para qué necesita Jeon enemigos?

"San, ¿recuerdas cuando te dije que eras una de las personas más importantes de mi vida?" resopla Jungkok, mientras cierra su taquilla de un portazo y le lanza a Choi una mirada filosa, que tiene la confusión plasmada por todo su rostro "Pues bajas un puesto en la lista cada vez que abres la boca." ironiza, y Mingi suelta una risa desvergonzada mientras que San le da un puñetazo en el hombro. Mingi sisea en respuesta mientras que se frota la zona "Lo mismo aplica para ti, Song. No sé quién de los dos es peor." Jungkook se pellizca el puente de la nariz en un gesto cansado. Y es que, cuando sus dos amigos hacen equipo para conspirar en su contra, Jungkook siente que envejece cinco años.

Mingi y San le muestran su mejor mueca de inocencia fingida con excelente coordinación, como si de dos gatitos indefensos se tratase.

"No sé de qué hablas, Kook. Nosotros somos dos angelitos." dice Mingi, encogiéndose de hombros mientras que pestañea repetidamente. San lo imita al instante, asintiendo con la cabeza en un intento de respaldar sus palabras.

"Pues como los dos angelitos sigan vacilándome, les va a tocar hacer media hora de entrenamiento extra." amenaza Jungkook, y ambos palidecen al instante.

Ya que Jungkook no tiene a nadie con quién aliarse en contra de ambos, tiene que idear en solitario su estrategia. A veces, usar sus privilegios como capitán parece ser la única opción viable.

Antes de que Mingi y San puedan replicar ante semejante injusticia, una tercera voz los interrumpe, haciendo que Jungkook se gire sobre sus talones para dedicarle su atención.

"¿Otra vez abusando de tu posición de poder, Capitán?" Park Jimin alza una ceja con burla, mientras que Taehyung, a su lado, se mantiene completamente impasible.

dive into you [kooktae]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora