Prólogo

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Hay muchas cosas que están fuera de nuestro control como las desgracias, las rupturas, la familia, las acciones del resto para con nosotros. Así no es como funciona la vida. Nosotros debemos adaptarnos a sus adversidades, es prácticamente una ley, de lo contrario estás condenado a vivir un camino miserable.

Lo único que si podemos controlar son nuestras decisiones.

Y siendo honesta, he tomado decisiones de mierda. Tan de mierda como para condenar mi vida de por vida y quizás esa sea una declaración muy dura para alguien que apenas tiene 16 años.

Pero lo cierto es que solo terminé en Hellsfield para terminar de pagar mis pecados y enterrar a la vieja Aurora. Ella era demasiado débil para sobrellevar todo lo que iba a seguir.

Lastimosamente no puedo adelantarles mucho sobre ello, pues para entender mi historia necesitan saber el principio. Necesitan saber que en algún momento yo fui otra persona, una que quería una vida normal y estable, solo que estaba demasiado perdida en mi propia mente como para poder saber que pronto todo se iría a la mierda.

Atte: Rory.

HellsfieldDonde viven las historias. Descúbrelo ahora