Christopher Bang, un alfa violento y agresivo, jefe de la mafia más poderosa del mundo, rodeado de enemigos que quieren destruirlo.
Kim SeungMin, un gamma sensible pero de carácter fuerte y agresivo cuando se requiere, la debilidad más hermosa de Ch...
Hyunjin entró a la casa, disparando todo a su alrededor mientras varios hombres de negro lo seguían, cubriendo su espalda mientras Chan y más hombres estaban afuera, impidiendo que la mafia enemiga entrara a la mansión.
El peli rubio subió casi corriendo las escaleras, siguiendo aquel aroma que ponía a su lobo en alerta, debía cuidar a su hermano menor y a SeungMin quien después de todo, ya era parte de la familia.
Los hombres que venían con él se repartieron las áreas por toda la casa, matando a los que llegaban a encontrar, el alfa corrió por varios pasillos, aquella mujer se estaba acercando al lugar donde había escondido al Omega y al gamma.
SeungMin se hizo más bolita en su pequeña manta al escuchar aquellos tacones resonando por todo el pasillo, Woojin temblaba en su lugar, en silencio, con miedo, se acercó a Kim y se hizo bolita a su lado, ambos se sentía amenazados, sin protección alguna y más el gamma al estar en cinta y no se encontraba en sus cinco sentidos.
--- ¡Detente! --- gritó Hyunjin apuntando a la mayor.
Winter se detuvo y sonrió al escuchar al Bang de en medio, aquel que tenía todo el rostro de su madre, de la persona a quien una vez llamó alfa y le juró amor hasta la muerte.
--- ¿Por qué debería?... ¿Tienes miedo? --- preguntó con burla, sin darse la vuelta aún.
--- Deja en paz a mi familia, nosotros no hemos hecho nada contra tí --- dijo el alfa.
La peli gris empezó a reír, llena de odio, con ganas de vengarse, con su corazón destruido y ya no podía perder nada más porque ya no tenía nada más que perder, se dió la vuelta, viendo al alfa con una sonrisa llena de odio, una sonrisa amarga.
--- Claro que sí, pregúntale a tu madre... Dile que que robo una vida a cambio de una vida destruida --- dijo caminando hacia el menor --- Solo dame a SeungMin, mi venganza no es contra él, es con ustedes --- dijo en una forma tranquila y no mentía.
El pequeño gamma había sido aquella pizca de esperanza para sanar su corazón de madre, de un pequeño que nunca llegó a nacer, su ira no iba a recaer en aquel pequeño que crío como suyo, solo quería destruir a los Bang con ayuda del pelirrojo.
--- No te creo... Y aunque fuera verdad, nunca te daría a SeungMin, él ya es parte de esta mafia y es nuestro deber protegerlo.
La mayor detuvo sus pasos y volvió a sonreír mientras su mirada bajaba hasta el arma en las manos del Bang de en medio.
--- No sabes de odio... Nunca has sufrido por cosas así, eres tan inocente --- dijo mirando directamente al menor --- Eres igual a tu madre y esa es tu condena... Tal vez seas quien sufra más.
Hyunjin la miró confundido, no sabía de qué estaba hablando, solo sabía que tenía que ver con su madre y el odio de aquella mujer, porque sí, podía ver el odio en sus ojos oscuros.
Y lo que pasó después nadie lo espero, la peli gris sacó una pequeña daga, clavando está en la mano izquierda del más alto, tomó el arma y apuntó justo al pecho del alfa quien de inmediato se quejó de dolor y quitó la daga de su mano.
--- Eso no es dolor --- dijo la beta en un tono frío, indiferente --- Aún te falta mucho dolor por experimentar.
SeungMin quien estaba escondido junto a Woojin en el pequeño armario donde guardaban las cosas de limpieza, escuchó todo lo que su Nana decía, la persona que se convirtió en su figura materna.
No podía permitir que le hiciera algo a Hyunjin, era el hermano de Chan, la persona que amaba y no dejaría que una persona querida le quitará el hermano a Bang, no lo iba a permitir.
Tomó su forma humana mientras apretaba su mantita, tenía miedo pero estaba decidido.
--- No... ¿Qué haces?, Quédate aquí --- susurró Woojin jalándolo de la pata con sus colmillos sin lastimarlo, pero SeungMin lo apartó con cuidado, poniendo su mantita encima de él.
Sin decir más, salió rápido del pequeño armario y corrió hacia donde estaba Hyunjin, viendo cómo su Nana le apuntaba con un arma.
--- ¡Nana basta! --- gritó con desesperación, poniéndose enfrente de Hyunjin para protegerlo.
Un fuerte disparo se escuchó por toda la mansión haciendo que los disparos de afuera desaparecieran, un silencio mortificante reinó por todo el lugar haciendo que el corazón de Chan latiera más rápido, lleno de miedo.
Algo no estaba bien, sentía dolor y su lobo estaba inquieto, se había vuelto loco, arañando su interior, aullando con fuerza y gruñiendo con odio.
--- ¡SeungMin! --- gritó Hyunjin con fuerza, tomando el cuerpo ligero del menor.
Ésto fue suficiente para que Bang tomara su forma animal y entrara a la mansión corriendo, subió rápido las escaleras, su desesperación cada vez se hacía más grande, al llegar al piso, vió a su pequeño en brazos de su hermano, sus manitos llenas de sangre y sus ojos entrecerrados.
Gruñó con fuerza, sintiendo el odio, el rencor y la ira en su interior, sus colmillos se hicieron más grandes, filosos y sus ojos completamente rojos, corrió hacía la mayor y se le fue encima.
--- ¡Hijo de perra! --- gritó la peli gris ante el dolor de aquellos colmillos, lo empujó con fuerza y tomó su forma animal de igual manera.
Un lobo café con varias cicatrices y en su cuello una marca grande de color rojo vivo, se veía reciente, sangraba pero aquella marca ya tenía tiempo, su mirada llena de dolor y odio fue lo que detuvo a Chan.
Ella ya estaba lastimada, estaba herida, el lobo es el reflejo del alma y aquel lobato estaba cansado, destruido, dolía con tan solo verla, ese era su verdadero yo de Winter, un pequeño lobo asustado, herido y destruido en mil pedazos.
Pero sobre todo, lleno de odio que una vez fue amor.
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Gracias por leer esta historia, Espero que les haya gustado, Nos vemos en el próximo Capítulo ✨
