𝓕𝓪𝓶𝓮 // 𝓣𝓸𝓶 𝓚𝓪𝓾𝓵𝓲𝓽𝔃

Eight

EMILY

En mi casa todos nos despertamos casi a la vez desayunamos, yo me duché rápido y me puse un vestido por arriba de la rodillas con una apertura en la pierna. Ellos solo se cambiaron.

Los chicos me han invitado a su estudio y yo pues iba a ir. Pero primero pasamos por su casa y cada uno se fuese a duchar. Yo me quede viendo su casa. Era mucho más grande que la mía, tenía dos plantas, arriba estaban sus habitaciones y abajo todo lo demás, menos el baño tenían dos arriba y uno abajo.

Me quede viendo algunas fotos. La mayoría eran de ellos cuatro de pequeños. Y alguien a pareció detrás mía.

-Esta foto fue tomada cuando conseguimos hacer nuestra primera canción -me señaló Gus uña foto donde se podían ver que todos estaban abrazados y sonrientes.

-Erais unos bebés -le mire sonriendo y el asiento con la cabeza mirándome. -Ahora también los sois -le dije apretándole los mofletes ligeramente pero él se apartó con una sonrisa falsa.

-No somos unos bebés -dijo Georg apareciendo con el ceño ligeramente fruncido. Que mono.

-Lo que vosotros digáis- y volví a mirar las fotos -Me encanta esta -señalé una en la que estaban posando como si fueran malos. -Erais demasiado adorables.

-Osea, que para ti, soy adorable y sexy ¿verdad, princesa?

Iba a contestar pero Gus me interrumpió -¡No! ¡Ni hablar! Luego si queréis coqueteáis, pero no enfrente nuestra. No comáis comida enfrente de los pobres -Georg le dio la razón y justo bajo Bill.

Los chicos se adelantaron discutiendo diciendo que íbamos a coquetear pero Tom se negaba.

Me fije más en Bill. Sus ojos estaba rojos, las pestañas tenían un poco de rímel igual que la raya de los ojos. Pero parecía que se lo había quitado ya que algunas zonas las tenia rojas. Bill al parecer se dio cuenta de que yo me di cuenta de que se había quitado el maquillaje y probablemente había llorado.

Él sin pensarlo ando rapidísimo que yo tuve que correr para cogerle de la mano y pararle.

-Bill... -dije con suavidad, el no me miró. -Vale, sé que no quieres hablar del tema, pero si es por lo de ayer. Lo que dijo el sin futuro ese no debería importarte. -Su mirada seguía fija en el suelo pero asintió despacio -Para lo que necesites estoy, ¿vale? -asintió de nuevo y me abrazo yo le devolví el abrazo más fuerte.

Ambos volvimos hacia los chicos Tom me miró y luego a su hermano frunciendo el ceño.

-Bueno ¿qué? ¿nos vamos? -pregunto Bill dando una palmada y los demás asintieron.

Todos nos subimos al coche, conducía Gus, de copiloto iba Bill atrás estábamos Georg, Tom y yo. Los tres íbamos un poco apretados, eso hacía que mi pierna se tocara con la de Tom. Parecía no molestarle y a mi tampoco. Se podía notar ligeramente la tensión.