17. Calma

3K 261 804
                                    

"Es de mi agrado informales que el código azul ha sido activado. Cualquiera que me traiga a Sonic tendrá su recompensa"

El mensaje se transmitió en la madrugada, tardó 0.16 segundos en llegar a los dispositivos destinados y entre 0 a 30 minutos en ser leído por sus respectivos dueños.

T.W. Barker miró su teléfono con una ceja levantada, ¿Por qué ese erizo azul se parecía tanto a la rata escurridiza de Manic? Extraño, ¿No?

Cuando Orbot y Cubot terminaron de mandar el mensaje y su jefe ya no pidió nada más, se movieron al elevador de Omega.

—E-e-e-ssssssTas seguro d-E EsTO?— preguntó Cubot, su cabeza ladeada, sacaba chispas del cuello, y tenía abolladuras en diferentes zonas. Uno de sus ojos ya parpadeaba y Orbot se notaba obviamente preocupado.

Regularmente cuando Robotnik daña así alguno de sus robots, eventualmente algo le sale bien y está dispuesto hasta a darles mejoras. Lamentablemente desde principios del año había sido una constante de malas rachas que inclinaba a ambos robots a arreglarse mutuamente. Usualmente Orbot a Cubot pues el segundo siempre tendía a estar en los peores momentos cuando Robotnik se enojaba.

—Mi soldador ya no funciona— le explicó el de rojo. —Y tal vez Omega se vea amenazante pero si lo piensas bien no somos tan diferentes— levantó un dedo para proceder a explicar. —Tal vez sea la creación más importante, querida, poderosa, inteligente, fuerte, resistente e invencible del Dr Robotnik pero, los tres tenemos al mismo padre.

Las compuertas se abrieron y Orbot jaló a Cubot al interior del taller ajeno.

Las luces estaban apagadas y los sonidos metálicos que rodeaban el lugar le daban un aura lúgubre que hacía temblar a Cubot. Aunque Orbot ya no estaba seguro si era miedo o sus cortocircuitos.

—¿Hola?— habló Orbot y le respondió el eco de su propia voz. Con incertidumbre, caminaron más al interior.

—T-t-t-Ta-al vez n-o essssTA— Cubot pensaba darse la vuelta para regresar, pero Orbot lo detuvo.

—¿Escuchas eso?— el de rojo guardó completo silencio. —¿Respiraciones?

—Y-o no no no EscucHo n-a-a-da— pero Cubot ya tenía sus sensores dañados.

Orbot entrecerró los ojos, un peculiar bulto yacía al fondo del taller. Cambio su visión para escanear el lugar y al encender el escáner, el inmenso cuerpo de Omega se atravesó.

—Intruso detectado— recitó y ambos robots entraron en pánico. —Eliminar— cambió sus brazos por armas y Cubot comenzó a soltar chispas en pánico.

—¡Espera! ¡Espera!— Orbot levantó ambas manos. —¡Somos tus compañeros de trabajo!

Omega se mantuvo impasivo en su lugar, sin atacar, pero tampoco sin dar indicios de bajar la guardia. —El taller de Omega es acceso restringido.

—¡EL mE obli-i-go a VenIR!— Cubot se separó de Orbot y el de rojo le lanzó una mirada acusadora.

—En realidad— sin bajar las manos, Orbot buscó explicarse. —Veníamos a preguntar si nos podrías prestar tu soldador. Verás, mi compañero— apuntó al de amarillo que soltó ligeras chispas de nuevo —Está muy mal.

My Heart Beats Boom Boom Boom ||SHADONIC||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora