¡Cachorros!

35

La muerte de Baji fue un golpe para todos, pero más para aquel pequeño niño que estaba solo en esa vida. Su madre no estaba lo había dejado, su padre había muerto y ahora se enteraba que tenía un hermano. El mundo era muy pequeño. Su padre había tenido un Omega muy bueno y  que lo había dejado por su madre. Ese Omega le había ayudado demasiado más en la situación en la que estaba. Describir el culpable de la muerte de su padre sería una lata, ya que sus tíos no iban descansar hasta que encontraran el culpable de todo.

— Mafuyu — la voz de aquella persona lo había sacado de sus pensamientos — quiero hablar contigo.

— Yo también quiero hablar contigo — su voz se escuchaba ronca, después de esos días en el hospital había salido.

— Ya sabrás todo, de verdad yo no sabía que eres mi hermano — Kei miro al chico enfrente suyo — nunca me importo al saber de mi padre alfa, tenía a mi madre a mi tío y mis primos.

— Aunque entiendo el hecho de porque lo habrás hecho, papá engaño a tu mamá, pero aún así sigues siendo mi hermano. Papá hablaba de un Omega, no sabía de quién hablaba. Hasta ahora me doy cuenta de que mi nombre es un similitud con el nombre de tu madre. ¿De verdad no te diste cuenta? — miro al chico y este rio.

— La verdad no le preste demasiado  atención el nombre, no me importaba mucho que digamos — Se encogió de hombros — Mafuyu, no estás solo en este mundo. Ahora en adelante me tienes a mi, siempre quise un hermano menor, esos idiotas que tengo como primos no cuentan.

— Gracias por aceptarme — sonrió — de verdad que gracias, estar solo en este mundo sin tener a esa persona que le importabas mucho. Papá era un idiota pero era un buen padre, jamás me dejó solo y nunca me dejó de amar después de lo que hizo.

— Supongo que Baji quería remediar sus errores. Hasta me da un poco de celos, pero yo tengo a mi madre que me cuida y me ama demasiado — Kei se sonrojo levemente, era la primera vez que se sonrojaba delante de alguien que no fuera si familia — En la casa siempre serás bienvenido, mamá quiere hablar contigo.

Mafuyu asintió con la cabeza.

— Vamos los demás nos esperan — Kei tomo el hombro de su hermano y caminaron hacia el lugar de la reunión.

Shino y Manji sonreían ante la interacción de los dos, su primo se veía muy feliz y eso a ellos les hacía feliz.

**

Kazutora estaba muy deprimido, aunque quería demostrar algo que la verdad no podía ocultar. Había perdido su mejor amigo, su hermano y después casi iba perder a su sobrino. En todo caso quería describir quien había hecho esto.

— Deberías de arreglarte, pronto saldrás — Sanzu se cruzó de brazos al ver el estado de su esposo.

— Ya voy — Se levantó de su cama y fue al baño.

Se iba ir de viaje, tenía que investigar quién había Sido el responsable. Aunque ya habían mandado gente, él quería hacer la investigación. No quería solo quedarse en su casa y llorar más. Se iría a despedir de su cachorro, aunque se le hiciera tarde.

Sanzu sabía que Kazutora le había dolido bastante la muerte de Baji, eran tan cercanos que en algún momento le daba celos, pero los dos se trataban como hermanos. Había vivido grandes cosas junto con ellos, porque también sabía el dolor de perder run amigo, después de todo Baji era su amigo de la infancia. Perder uno era un golpe duro, Baji era un idiota que le sacaba de sus casillas, pero era un amigo muy fiel y con quién podías confiar. Entonces, ¿por qué él? Era demasiado bueno, aunque tenía muchos antecedentes siendo del inicio de su adolescencia.

— Me despediré de mi cachorro — Kazutora salió del baño con una bata de color azul — después me iré directo al aeropuerto.

— Te acompañare — Sanzu se dió vuelta —

Los dos estaban dolidos, los dos se comprendían el dolor de perder a esa persona. Pero así era la vida de un mafioso, doloroso y cruel, eran unos adultos que ya no pueden jugar ser pandilleros, eso se había acabado desde hace tiempo, ahora estaban en un mundo peor, ahora o sabrían quien será el siguiente que muera. Kazutora solo priorizaba a sus cachorro, no quería dejarlo solo y mucho menos quería dejarle ese dolor tan feo.

**

— El siguiente es este — en un tablero estaba pegados varias fotos, una navaja estaba clavada en una fotografía, era aal de Baji.

Una persona clavo la navaja a una de las fotografías, está persona era un rubio de trenzas.

— Será difícil, pero al ser el segundo al mando puede que caiga todo su imperio — Rio levemente.

— Yo me encargo de él

— Como quieras, pero lo quiero muerto. Quiero acabar con todos ellos, así que ve hacer el trabajo bien — con una sonrisa miro a la persona encargada.

— Claro, lo complicado me gusta — se dió media vuelta para irse de una vez.

Vio las fotografías con una sonrisa llena de maldad, ya había matado uno ahora falta los demás. Uno por uno haría sufrir a esos bastardos.

***

Corto, pero seguro.

Ojalá y les guste el capítulo de hoy.