Olor A Durazno || Kaigaku×Zenitsu [Bl]

capítulo 18

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Su mirada viajo por el techo, estaba algo destrozado y ya con hongos, quitar la madera vieja era simple, por lo que remodelar ese techo seria simple.

Había "asaltado una tienda", claro que dejo dinero para amortiguar lo que saco, madera gruesa que servía para el tejado, era perfecto, el viento aún era fuerte, y en esos tiempos era posible que lluviera. Y es por eso mismo que prefirió hacerlo todo rápido, quitando la madera vieja y clavando rápidamente la nueva.

La casa era grande, checando el lugar, pudo encontrar al rededor de 4 habitaciones, 2 baños, una sala algo grande, la cocina que debía reparar y cambiar cosas, las puertas estaban algo viejas pero servían.

Y una suave lluvia comenzó a descender, el tejado era perfecto, no había ningúna gotera o algo que permitiera el ingreso de agua en la casa, suspiro por haber realizado bien su trabajo. Había una escoba que podia ayudarle. Limpio cada rincón de la casa, había bastante telaraña en algunas habitaciones, al igual que ropa antigua de su abuelo.

-...podria dársela para los cachorros, estan viejas pero una lavada y era.

Reviso los armarios, había ropa del abuelo, y una que otra prenda de él y de zenitsu, habían colchas viejas y rotas, seguramente obra de algún raton, por lo que saco toda las cosas sucias y que estuvieran rotas. Habían velas en la cocina, asi que colocó algunas en ciertos lugares para alumbrar, aún que no lo necesitará.

-debo reparar los cables de electricidad...

Kaigaku miro las linternas que funcionaban a base de energía eléctrica, no recordaba mucho el como era que funcionaba el sistema, la casa en si no estaba lejos del poblado, era cosa de pasar el bosque de duraznos y podian llegar a las demás casas del poblado.

Podia buscar algún hombre que supiera del sistema o simplemente vivir a base de velas, aún que no eran muy efectivas. Las habitaciones estaban ya limpias, el problema ahora era las ventanas, estaban rotas y algo caidas, seguramente por las ráfagas de viento y la madera podrida, debía remplazarlas, por ahora solo podia poner unas sabanas que cubrieran por el momento, asi no entraría agua.

No había demorado mucho en reparar el tejado, y las cosas sucias, viejas y rotas ya estaban en unas bolsas de tela, servirian para hacer fuego, la cocina aún era util.

La casa estaba limpia y casí lista, ahora debía reemplazar las ventanas que estaban rotas y los cables que alimentaban las linternas, luego ya podrian mudarse junto a su rubio, las habitaciones eran amplias y grandes, si llegaban a tener bastantes cachorros podrian dormir todos juntos.

Observó sutilmente el lugar, su mirada turquesa brillo sutilmente, cada griterío de zenitsu se instalo en su oído, fue un pequeño recuerdo de cada momento en aquel lugar.

Era lindo, algo lastimero, pero podia recordar cada sonrisa del rubio, pequeñas imagenes se proyectaron en su mente, recordando varios momentos en donde obligadamente se vio en vuelto en un abrazó "familiar".

—es mi culpa...

Una fina lagrima se deslizo hasta el mentón, podia recordar sus propios gritos de desprecios hacía ambos que lo consideraban su familia.

La mirada del abuelo reprocharle, la mirada triste del rubio, cada recuerdo lo volvía doloroso, y se deslizó lentamente hacía el suelo, acurrucandose en su propio lugar, estaba arrepentido...