Olor A Durazno || Kaigaku×Zenitsu [Bl]

Extra 4

[>>>]

Año y medio.

Gyomei era un alfa enorme. Su enorme apariencia y además, su aroma y personalidad amable, llamaban la atención de cualquiera.

—hola papá.

Kaigaku saluda, era algo tarde, zenitsu había ido a una revisión a la finca mariposa, donde se tomo la libertad de llevar a sus pequeños con su:"abuelo paterno".

Gyomei sonríe, había presenciado el aroma de kaigaku a cierta distancia, saludo amigablemente, estaba sentado con algunos gatos a su alrededor. Kaigaku se acerco donde gyomei, dejando a sus hijos en el tatami. Tomando la libertad de recostarse en una pierna de quien consideraba que era su padre.

—¿como has estado?.

Gyomei acaricia la cabeza de kaigaku con cariño, quién sonríe de forma infantil, adoraba la atención de su "padre".

—bien, ¿y tú?

—todo bien, ¿que a sucedido con tu omega?.

—se acerca su periodo de celo, es en tres meses aún, hotaka y Hiroyuki aun estan pequeños para otros bebés, asi que esperaremos a que el celo sea con supresores.

Kaigaku explica de manera tranquila, debia razonar con la cabeza, tal vez el siguiente año tener un nuevo bebé sería lo más lógico.

Hotaka estaba gateando hacía el enorme alfa que compartía con su padre, algo extrañado, un par de veces lo había visto, pero no de cerca.

Hiroyuki por su parte, estaba encantado con esas criaturas, hacian un sonido tan extraño, era relajante.

Kaigaku estaba atento, apesar de estar hablando de forma amena con gyomei, estaba atento de sus hijos, hotaka tenia su pequeño ceño fruncido, parecia que tenia dudas, y hiroyuki estaba jugando con los gatos de su padre.

—¿sucede algo?.

Gyomei ladea levemente su cabeza, kaigaku sonríe y se levanta, yendo a por su hijo omega, hotaka.

—¿quieres cargar a hotaka? Se que no sueles cargar a los cachorros por miedo a lastimarlos.— kaigaku sonrie levemente—.

—¿seguro?. Son pequeños, y mi fuerza podria hacerles daño...

—no te preocupes, papá, confío en tí.

Hotaka mira al gran alfa, ladeando su cabecita y mirando a su padre, quién le sonreía, trasmitiendo confianza de manera automática.

Gyomei suspira levemente, estaba algo nervioso, acerco una de sus manos, donde kaigaku se encargó de guiarlo, apoyando el pequeño cuerpo de hotaka en el dorso.

—ya está, no pasa nada malo.

kaigaku sonríe amablemente, observando como hotaka olisquea el cuello ajeno, frunciendo su ceño al no captar el aroma de su padre.

—hotaka, es mi papá, es familia, ¿vale?. No pasa nada malo.

Hiroyuki emite un pequeño chillido, captando enseguida la atención de kaigaku, quién lo alza en brazos.

—¿quieres abrazar al abuelo también?.

—¿no pasara nada malo?.

Gyomei pregunta de forma insegura, kaigaku ríe, sentándose en el regazo del contrario, no había nada malo que hiciera algo asi, kaigaku muchas veces se auto declaro hijo de gyomei ante los demás pilares. Gyomei nunca negó esa petición, por lo que también solia confirmar que era su hijo, claramente adoptivo pero prefería decir que simplemente era su hijo.

—hotaka esta algo confundido, pero hiroyuki seguro que se acostumbra, cuando crezcan un poco más, estaran felices de tener un abuelo.

Gyomei sonríe ante aquella ilusión, no poseía familia viva, por lo que imaginar aquello se le hizo sumamente tierno. Por lo que abrazó con cuidado a kaigaku, apegandolo a su dorso, liberando feromonas de felicidad, impregnando a kaigaku con su olor.

Kaigaku se quedó algo confundido ante el repentino afecto, pero aún así, no evitó que aquel pequeño momento le alegrará la noche, sus hijos estaban con quién consideraba en cierto punto a alguién esencial en su vida.

—me alegra saber, que me des una oportunidad como está.

Gyomei acaricia con su mano libre la cabellera obsidiana de kaigaku, quién se apega fuertemente al contrario.

—yo, quiero emendar mi error.

—ya lo has hecho, no te preocupes.

Kaigaku sonríe levemente, sus ojos turquesas tienen un brillo especial, donde hiroyuki capta el extraño comportamiento de su padre, hotaka no evita soltar pequeños balbuceos, apuntando hacia una puerta.

—vaya, ¿y no me han invitado al abrazo familiar?, Que triste.

Zenitsu suspira, tenia unos papeles y unas hierbas, donde se acercó hacía los dos alfas. Había algo extraño en el ambiente.

—¿que pasa, dije algo malo?.

Zenitsu ladea su cabeza, donde kaigaku palmea su regazo, esperándolo para abrazarlo de igual forma.

—abrazó familiar.

Comentó kaigaku, sancandole una suave sonrisa a zenitsu, quién se acercó a gyomei y kaigaku, los pequeños se aferraron enseguida a su madre, donde los brazos de gyomei los arropa y sonríe, meciendo a todos como pequeños cachorros.

[>>>]