Alfa Protector |Ziam|

12

Suspiró cansado cuando el molesto sonido repetitivo de su alarma comenzó a sonar avisando la hora para alistarse e irse a la escuela. Liam solo quería dormir un rato más.

—¡A levantarse, Alfas testarudos!

El gritó de su madre más los toques en su puerta no le dieron más remedio que levantarse de su cómoda y calentita cama.

Echó agua en su cara al llegar al baño con el propósito de quitar todo rastro de sueño en él. Bostezó, cepilló sus dientes y salió para vestirse. Más al rato se bañaría, justo ahora no tenía ganas.

Vistió un pantalón holgado que se ajustaba a su cintura y a sus tobillos, una camisa negra que se escondía al final por el pantalón y un saco beige para cubrirse del leve frío que comenzaba a hacer en esa época.

Bajó a la cocina para tomar una manzana y la mochila que reposaba en el sofá de la sala. Sus demás hermanos bajaron aún con pijama.

—¿Mmh? ¿A dónde vas tan temprano y arreglado? —Louis talló su ojo con su mano hecho puño.

Su padre y su madre entraron bajando de las escaleras con las manos unidas, dándose leves besos con cariño. El Alfa lo miró raro mientras su esposa acomodaba su corbata.

—¿Te sientes mal, Liam? —dijo con burla.

Él bufó.

—Quedé de pasar por Zaynie e ir por unos cafés fríos —sus hermanos rieron.

—Lo que uno hace por amor —uno de los mellizos habló. Liam no quiso quedarse callado.

—Ugh, mejor ni hables que andas igual con el tal Shawn —Niall corrió al menor con las intenciones de ahorcarlo, el brazo de su padre lo detuvo.

—Ya, ya, cachorros —la Alfa viro los ojos.

El rubio no dijo más y salió de la casa para comenzar a caminar a la casa de su pareja.

❤️🐺🐺💛

—¡Liii! —corrió a él con una sonrisa plasmada en su cara.

El Alfa lo recibió gustoso, depositando un suave beso en los labios del chico. Nada mejor que un beso bajo el cálido sol y el leve viento frío.

—¿Listo? —preguntó sonriendo.

—¿Para ir a la escuela? No —rió.

Tomados de la mano caminaron a la estación del autobús, en donde no esperaron mucho para que el transporte llegara. Subieron pagando sus pasajes y se sentaron en uno de los asientos de adelante, solo habían estudiantes en él con celulares y una anciana medio dormida.

—¿Crees que sería bueno contarles a los chicos? —la pregunta de su pareja lo hizo desviar la mirada de los mensajes que su madre le enviaba.

—Sólo si tú quieres, si se los contarás es porque les tienes confianza, no porque te sientas presionado —acarició los cabellos de su nuca.

—Se las tengo —afirmó.

—Entonces diles —el autobús detuvo su andar para parar frente a la Universidad.

El camión se vacío con pereza. La pareja entró a la institución riendo por sus locuras. Sus amigos llegaron al poco tiempo. Harry saltó al peliazul sonriente.

—¡Zaynie! —recibió un beso húmedo en la mejilla.

—Ew, te he dicho que sin baba —sobó su mejilla intentado limpiarse, su amigo presionó su mano en el pecho —¿Oh, Lou te marcó? —la pregunta hizo sonrojar al chico ojiverde, más al ver las miradas celosas de Omegas.

—¡Shh! Y sí, fue en su celo, el mío también se adelantó y pedí que me marcara —respondió.

—¿Y tus padres, Hazza?

—A ellos no les importó mucho, dijeron que si lo amaba no me regañarían, que ya era un adulto responsable.

Zayn rió y abrazó a Harry.

—¡Felicidades!

❤️🐺🐺💛

—Chicos —habló al ver a su novio alejarse, los Alfas miraron al ojimiel.

—¿Qué?

—Quiero marcar a Zayn —lo dicho por el Alfa hizo que sus hermanos se ahogaran con comida y agua.

Eso no lo esperaban.

—¿Ya? —preguntó el mayor de todos.

—Bueno, tú marcaste a Harry justo ahora —Louis rodó los ojos—. Sé que él también lo quiere, antes me preguntó cuándo era mi celo, quiero hacerlo —sus nervios salieron a flote, haciéndolo sudar por las manos.

—¿Cuándo es tu celo? —Ed lo miró tomando su jugo.

—Este mes —los Alfas chasquearon la lengua.

—Podemos ayudarte —sugirió el más bajo—. La primera vez no será tan perfecta, eso es seguro, habrá fallas y no es malo, pero podemos enseñarte como mejorar y complacer más a tu Omega. Ese tiempo en donde ellos solo nos complacían a los Alfas ya quedó muy en el pasado —Liam sonrió agradecido.

—¡Los amo tanto!