Alfa Protector |Ziam|

01

Un leve sollozo salió de sus labios, sus ojos picaban de tanto sacar las lágrimas que por mucho tiempo contuvo, su garganta estaba ya seca de ahogar gritos que venían desde lo profundo de su corazón destruido.

Su espalda se recargó en la fría pared y resbaló en ella hasta tocar el piso sucio de aquel cuarto que solo era cubierto por la inmensa oscuridad, que en ese momento era su única compañía. Flexionó sus rodillas hasta que sus muslos tocaron su pecho y su cabeza tocó las rodillas lastimadas debido a los tropiezos que había tenido antes de llegar a ese lugar.

Las lágrimas seguían bajando por sus sonrojadas mejillas, su cabello estaba en distintas direcciones, con restos de huevo crudo y harina que caían revueltos en gotas hasta al suelo.

Un suave toque en la puerta de metal lo alertó, mas lo ignoró al no querer ver a nadie en ese momento, quería hundirse solo en su propio mundo en donde no había nada más que tranquilidad y seguridad. Quería sentirse seguro, lo ansiaba en demasía pero en ese lugar no era posible encontrar lo que tanto esperaba.

El crujir de la puerta le hizo mirar a la única luz que entró por la pequeña rendija de la que se colaba, una sombra se reflejó y Zayn sonrió al saber ya muy bien de quién se trataba. Liam entró por esa puerta, cerrando tras de sí, tratando adaptarse a la oscuridad para encontrar al mayor.

— ¿Bebé? — el pelinegro sonrió por aquel apodo que desde hace mucho le había dado. — Venga, sé que estás aquí, ¿en qué parte estás?, no logro ver nada.

Aclaró su garganta antes de responderle al castaño, logrando llamar su atención.

—N-no deberías es-estar aquí — un leve sollozo se escuchó, preocupando al chico, quien trató de guiarse por su linda voz- —E-ellos se enterarán, Li.

— ¿Y?, ¿Crees que sus estúpidos cometarios me importan? —sin darse cuenta en que minuto, el ojimiel llegó, se posicionó al lado de él, sentándose y pasando su brazo por encima de sus hombros.—Te amo, Zayn Malik. Ellos lo pagarán muy caro, créeme —sin decir más, el menor se levantó luego de darle un pequeño beso en los delgados labios del azabache, y caminó hasta salir del cuarto diciendo en un leve susurro.

<<Todo el mundo se enterará de que eres mi Omega, Zayn>>