Alfa Protector |Ziam|

28

Los tres Alfas cayeron al piso de un solo empujón, mirando al chico de cabello castaño corto se levantaron con rapidez y corrieron despavoridos lejos de aquél chico con extrema fuerza.

Liam rió viendo cómo se alejaban temblando del miedo que él mismo les producía.

Tronó sus dedos y cuello para no sentirlos entumecidos y caminó hasta su mochila para tomarla y seguir su camino. Un líquido tibio recorrió su labios hasta caer como gota en el suelo liso. Estaba sangrando debido al único golpe que le habían dado. Tocó su mejilla, sintiendo un ligero dolor en su pómulo derecho. Quizá le saldría un moretón, aunque eso no era un problema.

Recorrió con tranquilidad el pasillo de la escuela, sintiendo las miradas de temor de sus compañeros, después de todo, lo acaban de ver en una pelea con los tres Alfas más fuertes de tercer grado, pero su fuerza no superaba a la de un Alfa de alto rango.

—¡Permiso, permi-

Un cuerpo pequeño chocó con el suyo, él se mantuvo quieto aún si había sido golpeado con fuerza por el otro, quien cayó al suelo.

Su vista quedó en él, eran tan lindo que no pudo despegarla. Tenía cabellos pelinegros, hermosos ojos color ámbar, un short de mezclilla que llegaba antes de medio muslo y una camisa muy holgada que le tapaba las caderas. Era hermoso.

LP aulló y agitó la cola como lobo juguetón, corriendo por todos lados con una inmensa alegría. Pudo escuchar otro chillido, uno de un Omega. Agitó su cabeza al ver como las rodillas del chico estaban lastimadas y extendió su mano con el afán de ayudar, sabiendo que tal vez este se negaría al saber con quién hablaba, pero eso no pasó.

El pelinegro sonrió para él y aceptó la ayuda, colocando delicadamente su mano sobre la suya esperando a que lo levantara de un tirón.

—¡Muchas gracias! Perdón por chocar contigo, venía con prisa porque tengo que entregar algo —sonrió.

Oh, esa sonrisa provocó un vuelco y por poco tuvo un sonrojo, ¡por poco!

Asintió y se apartó de él para esquivarlo y seguir su camino.

—¡Soy Zayn, un gusto!, mis amigos me dicen Zee, así que puedes decirme así.

Apretó sus labios asintiendo.

—Liam

Fue lo último que dijo antes de dejarlo atrás.

❤️🐺🐺💛

—Así que aquí está el Alfa caballeroso.

Una risa burlona se escuchó a sus espaldas, volteó los ojos para luego ver como la otra Alfa se sentaba frente a él observando como comía su almuerzo.

—¿Qué?

—¿Qué de qué?

—Kat, te juro que si vienes a joder te di-

—Si, si, si.

Su mano se sacudió restándole importancia. Kat rió al ver su expresión molesta. La actitud del ojimiel que escuchó por los rumores no era lo habitual en él.

—Obvio que te vengo a joder, Liam. Dios, eres un cabrón de lo peor y ahora resulta que ayudas a Omegas tirados en medio del pasillo.

—Jodete, Kat

Revolvió los largos cabellos de la chica, riéndose al ver como se quejaba de tal acto y se retiró del lugar antes de que su amiga lo molestara más, claro, no contó con que Camila se aparecería en su camino. Ellas eran tal para cual, comenzaba a cuestionarse por qué se juntaba con ese par.

—Uh, Li, el galán.

Golpeó su hombro sin fuerza y sonrió al ver que logró su cometido de hacer enojar al Alfa.

—¡Mierda! ¿Ahora ya no puedo solo ayudar a un chico que se cayó por mi culpa acaso? Es que tú y Kat piensan igual, Dios.

Beta y Alfa levantaron la ceja.

—Te conocemos, Payne. Tú no ayudas a alguien ni porque lo hayas tirado sin querer, ¿que le viste al chico?

—Nada

Bufando salió de la cafetería aventando a quien se le atravesara.

❤️🐺🐺💛

—¡Li, Li!

<<¡Es él!>>

Mandó a callar al lobo que últimamente estaba más ansioso que de costumbre. Algo raro sabiendo que LP era un Alfa que apenas y se dejaba ver, y no por timidez, simplemente no quería. Ahora comprendía a su querida amiga Kat, quizá si tenía razón.

Un jadeante Zayn llegó a él corriendo mientras sostenía un cuaderno en mano y portaba una linda corona de flores en su cabeza. ¿Acaso era Afrodita? Porque parecía.

Recargó su cabeza en el árbol, dejando que sus labios crearan una leve sonrisa al ver al Omega sonrojado.

—¡Te estuve buscando por todos lados! Estuve preguntando por ti pero cada que decía tu nombre se alejaban viéndome raro, ¿por qué?

Sonriendo se sentó a su lado para no estar más bajo el intenso sol del día y apoyó su cabeza en el hombro ajeno. Liam se sintió ansioso al distinguir el delicioso olor del Omega, dejó a este reposar en su hombro por petición de su lobo, solo por eso, él no quería, no.

—Porque son unos idiotas, Zayn

La risita suave le alentó a reír de la misma forma.

Los alumnos que pasaban por allí miraron expectantes tal escena.

¿Quién iba a pensar que ese era el inicio de un lindo amor? Uno tan fuerte que era imposible de romper. Porque ZM y LP se habían unido desde ese día, reconociéndose como su otra mitad y amándose desde el primer segundo que conectaron miradas.

Un amoroso Omega y un Alfa protector habían nacido desde ese día.

Ellos dos se amaron desde siempre, incluso sin conocerse.