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"Te amaba con todo mi corazón."

Son muchas las cuestiones que rondaban en tu cabeza, la sonrisa de Pavitr era una de ellas.

¿A quién engañar? Si tu noción era ser sumamente específica, te referías tanto a su sonrisa, como su forma de hablar, como vestía, la forma en que le gustaba ostentar su cabello, su misteriosa destreza física. En conclusión, él era lo que rondaba por tu cabeza.

Y ahora estabas hecha polvo.

Gayatri era sin duda, una flor en todo su esplendor, delicada, elegante, brillante y sobretodo hermosa. Sí, si tuvieras que compararla, ella era la luna. Despampanante pero reservada en un silencio sepulcral, aún sin desearlo era capaz de hacer que cualquier otra persona a su lado pasara desapercibido.

Temo decir que para tu mala suerte, la que estaba a su lado siempre eras tú.

No era tan importante, Gayatri era demasiado adorable, buena amiga y fiel. Nunca hubo un malestar entre sus dos personalidades, porque encajaban a la perfección. Ella era la luna que se aseguraba de dar luz en la noche, tú eras una estrella que le acompañaba destellante, sin embargo, había ocasiones que eso no te era suficiente.

Tu aparente insensibilidad a la falta de atención no supuso mayor problema; introvertida por naturaleza, gozabas de los pequeños beneficios de ser amiga de alguien tan popular.

Fue así hasta que llegó él.

Fue la primera vez que deseaste algo tan intensamente.

"Por favor, fíjate en mí."

Tal vez tu esfuerzo no fue suficiente, o tal vez era que no conocías otro tipo de coqueteo que no sea solamente pedir algo mentalmente, con la esperanza de que la otra persona tuviera telepatía y así pudiera leer tus pensamientos.

No era rencor, pero realmente algo molesto nació entre Gayatri y tú cuando claramente viste su interés mutuo. Antes de que esta envidia pudiera crecer aún más, (lo cual, detestabas absolutamente) tu única amiga, pasó a ser una compañera más del salón.

Pareciera algo exagerado, a pesar  de eso, haberte alejado de ambos para que siguieran sus vidas fue muy terapéutico. Una persona que no solía mostrar sus emociones no podía decirle a su amiga cuan incómoda y celosa estaba de ella, pero sí podías salvar su relación de un posible rencor. Esto era "lo correcto", recuperarías tu estabilidad y ellos construirían lo suyo sin ningún tipo de interrupciones, obstáculos y terceras personas.

Todo estaba bien, sin dudas.

Pero un día, la luna ya no salió a iluminar más la oscuridad.

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After DarkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora