Sonrisas Falsas

Capítulo 15.

La vida nos pone obstáculos enfrente para poder llegar a ser más fuertes. Pero, ¿para qué ser fuertes? Si no existieran armas, guerras y las personas estuviéramos bien mentalizadas, no habría por qué llegar a querer ser fuerte. No habría por qué querer suicidarse.

Franklin: -Lizly, suelta el arma de tus manos. Te lo suplico.

Todo el mundo puede llegar a sufrir. Y ese sufrimiento puede ser escondido a través de una sonrisa o a través del arma que sostengo en mis manos.
¿Qué te hace ser feliz? La felicidad no dura para siempre y el dolor tampoco. Pero no puedo aguantar hasta que ese dolor desaparezca y que aquella felicidad lejana vuelva a aparecer algún día.

Me llevé a la cabeza la pistola que sostenía entre mis manos, mientras que las lágrimas descendían como la lluvia en un día tormentoso.- No podía aguantar más la presión que sentía por dentro. No podía soportar que toda mi vida en un abrir y cerrar de ojos ya no fuera la misma. Que todo cambiara a peor. Que en la persona en la que más confiaba, mi hermana, dejara de tener contacto conmigo por alguna extraña razón. Que la única persona que me hacía vivir, Dani, muriera sin ninguna explicación. ¡Ahora mi vida ya no tiene ningún sentido!- sonreí recordando los viejos tiempos. Por fin, estaba dispuesta a apretar el gatillo.

Franklin: -Lizly, por favor. Te lo suplico. Todo va a estar bien. Yo estaré siempre a tu lado. Yo...creo que me he enamorado de ti. No puedes dejarme, por favor Lizly. No me hagas esto. Te lo ruego. ¡Lizly!

Lizly: -Adiós, Franklin. Gracias por todo.

Franklin: -¡NO LIZLY!. Te lo ruego, por favor tira el arma. Por favor no te vayas. Joder, no me hagas esto. Delante de mis ojos NO- las lágrimas descendían de sus ojos recorriendo sus mejillas y se pasaba la mano por su pelo bien peinado para intentar controlar los nervios- Por favor...

Lizly: -Lo siento- sonreí y cerré mis ojos.

Iba a apretar el gatillo, cuando de repente sentí un fuerte golpe en mi cabeza que me hizo perder el conocimiento por completo.

Narra Franklin.

Ver a alguien que quiere suicidarse enfrente de tus propios ojos y no esperártelo de aquella persona es jodidamente doloroso. Pero lo que es más peor, es no poder hacer nada para ayudar.

¿Qué fue lo que la empujó a querer suicidarse? Ella siempre sabía cómo sobrellevar su estado emocional o eso creía tras esa sonrisa o esas lágrimas que desprendía. Pensé que ella lloraba para sentirse mejor pero creo que era todo lo contrario. Cada vez se derrumbaba más y más, y yo sin darme cuenta de algo tan evidente.

Lizly: -Lo siento- sonrió, cerró los ojos y la noté preparada para ir al otro mundo.

Franklin: -¡Nooooooooo!- corrí hacia ella con la esperanza de lograr detenerla. Pero Lizly, al instante cayó al suelo por el golpe recibido del palo de madera.

Franklin: -¿Qué...coño has hecho, Jason? ¿Acaso...la has matado?- se me contrajo el corazón.

Jason: -Tío, deja de llorar como un nenaza y piensa con la cabeza no con el culo. ¿Cómo coño voy a matarla? Eres gilipollas o ¿qué?

Franklin: -Pero....

Jason: -Peleas como un hombre pero lloras como un nenaza jajaja. No te preocupes, ella está bien. Tan solo le di un golpe para que descanse un poco, se la veía muy alterada.

Franklin: -Gracias, no pensé que me echarías una mano.

Jason: -El trabajo es el trabajo pero fuera de él, eres mi hermano. Por cierto, ¿realmente estás enamorado de ella?

Franklin: -Tan solo lo dije para que no se sintiera sola. No quería verla morir, al menos delante de mis ojos NO.

Jason: -Me lo suponía. Yo que tú, me plantearía la idea de volver con Tasya. Aunque sea sólo por una noche, ¿me entiendes, no? En fin, metamos al burro dentro.

Franklin: -¡No la toques! La meteré yo en casa. Tú quedate aquí fuera. Ni se te ocurra intentar algo con mi hermana- lo fulminé con la mirada.

Jason: -Que tu hermana esté como un tren no es culpa mía- me miraba burlón- Tantos gritos y Jessy sin haber escuchado nada. Jajaja Tienes a una hermana gilipollas pero se la puede perdonar por el cuerpo que tiene.

Franklin: -Jajaja. Es mi hermana, normal.

Cogí a Lizly en brazos -como a una princesa- y la metí en casa. Me dirigí hacia la habitación de Jessy -mi hermana- para dejar a Lizly sobre la cama, pero se podía escuchar música al otro lado de la puerta a un volumen bastante elevado, por lo que evidentemente opté por dejarla en mi habitación sobre mi cama.

-No entiendo por qué eres tan tonta y a la vez tan guapa- le susurraba al oído mientras peinaba su cabello con mis dedos- ¿Tan mal te sentiste que decidiste intentar quitarte la vida? Tú no estás sola Lizly, no estás sola- me mordí el labio inferior- Muero por tenerte otra vez entre mis brazos y hacerte mía una vez más. ¡Joder! ¡Joder! y ¡Joder! No me puedo creer que antes de conocerme no fueras un "angelito".- lo dije con un hilo de voz. La ira se estaba volviendo a apoderar de mí como en aquella noche.

Jason: -¿Por qué tardas tanto? Pensé que te estabas aprovechando de ella mientras dormía jajaja.

Franklin: -¡Cállate!

Jason al verme cabreado me sacó de la casa tirando de mi camisa a regaña dientes.

Jason: -Habla. Sé perfectamente que esa chica significa mucho para ti. ¿Qué te hace estar unida a ella, Franklin?

*****
Hola a TOD@S! Bueno, pensé que sería bueno reflejar algunos temas importantes.

En estos últimos meses hubieron muchas guerras en las que murieron personas inocentes como niños, adolescentes, padres e incluso bebés recién nacidos, y sólo porque hay gente asquerosa que desea tener poder. Por eso es que digo si todavía nadie se ha dado cuenta: Que este mundo es cruel.

Uno no puede ser egoísta y preocuparse sólo por sus problemas personales y pensar que se pueden solucionar con la muerte. Cuando los que te rodean pasan por una situación similar o peor que la tuya y son fuertes afrontándolos cara a cara o bien, con una sonrisa. En fin...

Sonreir ante la vida, es lo mejor!

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NUEVAMENTE GRACIAS POR LEER!.

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