T R E I N T A & T R E S

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Sí, quiero


La noche había caído.

Jimin montó en el coche de su padre, y Taehyung se acomodó en el asiento del copiloto y se abrochó a toda prisa el cinturón.

— ¿Por qué nunca me has dicho que tenías el carné de conducir?

El se encogió de hombros como toda respuesta mientras ajustaba el espejo del retrovisor. Se pusieron en marcha poco después.

— ¿Tú no tienes todavía el carné?

—No, acabo de cumplir los dieciocho —le recordó—. En Inglaterra somos civilizados, por eso no permitimos que niños de dieciséis años circulen por las calles a su antojo.

Taehyung no confiaba demasiado en el modo de conducir de Jimin, era similar al de Marcus; al parecer la falta de calma frente al volante era un problema familiar.

—¿Sabes...?, estaría bien que parases cuando hay una señal de stop o un semáforo en rojo.

—Ya, pero por aquí no pasa nadie, créeme —replicó él.

Encendió la radio del coche y comenzó a cantar entusiasmado. Taehyung se esforzó por no gritar y bajar del vehículo a toda prisa como último recurso para salvar su vida.

— ¡Relájate! —le pidió él.

— ¿Falta mucho para llegar?

—No. Y deja de aferrarte al asiento, me pone nervioso.

— ¡Mis nervios están a punto de estallar en mil pedazos, así que no me hables de los tuyos!

— ¡Taehyung, si sigues gritándome acabaremos teniendo un accidente de tráfico!

— ¡No me extrañaría! ¿Crees que han puesto aquí estos semáforos para decorar las calles con lucecitas de colores porque es Navidad?

Jimin ignoró sus comentarios durante el resto del trayecto. Taehyung se tranquilizó cuando él disminuyó la velocidad y se aproximaron hacia un cartel gigante protagonizado por una hamburguesa.

— ¿Adónde me llevas?

Jimin frenó cuando llegaron al carril adecuado, donde había una enorme fila de coches.

— ¡Bienvenido a McDonald's!

— ¡Santo Dios! —Taehyung se llevó una mano a la cabeza—. ¿Te has vuelto loco? Ante esto no pienso ceder, y me da igual que sea el deseo de tu vida.

Jimin dejó de contestar la infinidad de improperios que Taehyung le dedicó y avanzó por el carril del McAuto, hasta que llegaron a la ventanilla principal. Pidió dos menús y apenas unos minutos después le entregaron la comida con un «gracias por su visita, vuelva pronto».

蝙蝠之吻 [ VMin ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora