T R E S

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¡Adjudicado!


El resplandor del sol se filtraba tímidamente entre las nubes blancas, que parecían esponjosos trozos de algodón surcando el cielo. Jimin agachó la cabeza y caminó a paso rápido por el camino pedregoso frente a el, escuchando malhumorado los continuos suspiros de su compañero.

— ¿Puedes dejar de hacer eso? —exigió, metiendo las manos en los bolsillos del pantalón vaquero.

— ¿Dejar de hacer qué? —le preguntó Taehyung con fingida inocencia.

—Resoplar, bufar, suspirar...

Lo miró de reojo.

— ¿Acaso en América está prohibido hacerlo? —Emitió un chasquido de fastidio casi imperceptible—. Para que luego digan que Estados Unidos es la tierra de la libertad. Ni respirar se permite.

Jimin le miró asqueado y reanudó la marcha.

—No está prohibido, pero a mí me molesta.

Taehyung rió con ganas.

—Me molesta esto... me molesta lo otro... —lo imitó—. A mí en realidad me molesta tu cara y no me quejo.

— ¡Oh, usted perdone, Rey de la Belleza, olvidaba que eres el hermano gemelo de Brad Pitt! —replicó irónico y poniendo los ojos en blanco.

—Gracias por el halago —respondió Taehyung con un deje de satisfacción.

Jimin se cruzó de brazos consternado.

— ¡Era una broma, no iba en serio! —Agitó las manos en alto para dar énfasis a sus palabras.

Él sacudió la cabeza de un lado a otro, negando.

—Ahora no intentes arreglarlo —le aconsejó—. Has admitido que soy atractivo y punto. No te sientas culpable por ello —añadió guiñándole un ojo.

Jimin se llevó las manos a la cara y se frotó la frente totalmente desesperado. Gimoteó, pataleando en el suelo.

— ¡Dios mío, esto es una pesadilla! —exclamó apenado.

Taehyung sonrió con más ganas que nunca.

—Y eso que solo acaba de empezar... —le recordó, haciendo hincapié en el asunto.

— ¡Cállate! —gritó Jimin, nervioso.

Taehyung simuló cerrar la boca con una cremallera invisible y lanzar la inexistente llave hacia el prado de al lado. Después respiró hondo, cerró los ojos con placer tras llenar los pulmones de aire y lo soltó todo de golpe.

— ¿No te parece que es hora de regresar a casa? —preguntó Jimin pasados diez minutos.

Taehyung lo miró feliz, pero no dijo nada.

蝙蝠之吻 [ VMin ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora