Nico se alegraba de que Piper esté viva, no era lo adecuado, era 50% pez, pero era 50% mejor que el otro escenario que la esperaba. Se moría por preguntarle por qué estaba dispuesta a sacrificarse por él, entendía que lo haga por cualquiera de los demás, pero ¿por él?, lastimosamente no tocaba la oportunidad de hacerlo, siempre estaban en grupo y no estaba seguro de que si la respuesta de Piper lo avergonzaría, además, ella estaba muy molesta de ser una sirena y porque tenía que cambiar su camisa anaranjada el campamento mestizo, pues estaba manchada de sangre, cortada, e inutilizable. Lastimosamente, en Atlantis no hay ninguna camisetas, no necesitan vestir pues la mayoría de sus habitantes poseen escamas. Lo único que le pudieron dar a Piper son dos almejas elegantes en forma de traje de baño, su madre seguramente aprobaría, pero Piper no era su madre. Incluso escuchó como se quejaba con unos espíritus del agua que ni siquiera se podía vestir en la parte de abajo, ella jamás había sido un pez y no estaba acostumbrada andar por la vida sin pantalones, o al menos un short, ellas le explicaron amablemente los beneficios de poseer una cola y que no existe en todo el universo algo parecido a pantalones para peces, Nico se sintió avergonzado de escuchar esa conversación y se alejó rápidamente.
Piper salió de la habitación, sonrojada como nunca antes y con la campera de Talia puesta y abotonada hasta arriba, seguida por su enorme y elegante cola rosada. Después de cargar insumos como comida, cosas que les puedan servir y de despedirse de Tyson, emprendieron la misión mandada por sus amigos celestiales. Nico, Leo y Percy en hipocampo, Frank y Piper... ya saben.
- Leo – interrumpe Percy- debes construir otra pecera Piper, así nos puede acompañar en el Argo IV.
- No es gracioso Percy – interrumpe Piper furiosa.
A Nico le parecía que Percy estaba pasándose un poco con las bromas, lo que le sucedía a Piper era verdaderamente serio ¿Qué pasaría si ella no vuelve a recuperar las piernas? Además, el medio marino era muy familiar para Percy, pero completamente nuevo para Piper, quien se desplazaba bien a través del agua, pero de vez en cuando daba dos vueltas innecesarias al tratar de ir en línea recta. Percy sabía manejar las bromas para que, a pesar de la tragedia, causara gracia a todos, inclusive a Nico tuvo que contenerse la risa en algunas ocasiones.
- Por qué no lo callas con tu embruja-habla – pregunta Nico.
- Jason – responde enojada Piper – me hizo jurar por la laguna Estigia que no usaría contra ninguno de ustedes mi embruja-habla. Al no ser que sea para aliviar o en caso de necesidad.
- El amor, el amor, el amor – dice Leo.
- Ni me lo recuerdes – dice Piper – en ese momento ni se me cruzó por la cabeza que Percy podía burlarse de mi ¡Y menos que tendría una cola!
El viaje se hacía un poquito largo y ni siquiera estaban cerca de la mitad de camino, Nico había comido en Atlantis, pero no le parecía tan apetitoso comer sándwich mojado, estaba cansado de estar bajo el agua, sus dedos estaban más hecho uvas pasas que su padre pasado de años. Sentía que no le haría mal subir un momento a la superficie y captar aire que no esté viciado por su propio dióxido de carbono.
- Iré un momento arriba – dice Nico.
- Puedo acompañarte – pregunta Leo, por su rostro se notaba que pasaba por el mismo exceso de mar.
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Percy Jackson y la Tormenta en el Olimpo (LIBRO COMPLETO)
FanfictionPercy Jackson y los semidioses se enfrentan a una nueva aventura. Un año después de enfrentar a Gaia, en un paseo que pensaban sería de tranquilo, empiezan a pasar cosas raras sin explicación (no hay nada tranquilo al ser un semidiós). Algunos pierd...