XVIII

2.4K 105 38
                                    

Spreen;

Abrí la puerta del baño y pregunté a Carrera, que estaba esperando;

—¿Qué acaba de pasar allá? ¿En serio es T/N?, Amigo, no puedo creer que me la haya encontrado en estas circunstancias.

Carrera me tocó el hombro y respondió;

—Sí, amigo, lo acabas de escuchar y ver.

Me sentí abrumado y agaché la cabeza.

—Pero ¿Por qué con Roier? —pregunté, intentando procesar la información. Aldo me dijo que vendría con su hermana, pero me siento estúpido al no saber que era ella.

Carrera se encogió de hombros.

—¿Él nunca mencionó lo de Roier?.

Sacudí la cabeza.

—No, nunca me lo dijo. Tampoco tendría por qué, amigo, no sabía que a mí me gustaba su hermana. Yo quería conquistarla en este viaje, por eso vine, y tú sabías que si se daba algo, me quedaría aquí.

En ese momento, Roier salió detrás de un mueble y se acercó a mí con una mirada desafiante.

—¿Qué?, ¿Te gusta mi mujer, culero?

Carrera se asustó y sonrió nerviosamente.

—¿Qué haces allí, compañero?

Roier se acercó más.

—Pensaba asustarlos, pero quién salió sorprendido fui yo. ¡¿Cómo está eso que dijiste, cabrón?!

Me puse nervioso e intenté calmar la situación.

—Tranquilízate, hermano, no pasa nada. Era broma —dije, tratando de calmar la situación.

Pero Roier no se calmó.

—A mí no me sonó a broma —dijo, enojándose un poco más—. ¡No mames, Spreen!.

Carrera intervino, tomándolo de los hombros.

—Tranquilo, capo, igual si fuera verdad, ella está contigo, ¿No? Ya tienen una familia, relájate.

Me apresuré a agregar.

—Para, Roier, para. Carrera tiene razón. Amigo, no quiero problemas. Solo digo que... —pausé, buscando las palabras adecuadas—... me sorprendió verla aquí, contigo.

[•••]

Roier;

Me sentía demasiado enojado con lo que había escuchado. La idea de que Spreen se hubiera enamorado de mi T/N, mi pareja y madre de mi hijo, me hacía hervir la sangre. Pero al mismo tiempo, sabía que no tenía derecho a sentirme así. Ella estaba conmigo, había elegido estar conmigo, y teníamos un hijo juntos.

Carrera tenido razón al decir que debía relajarme, al final ella estaba conmigo y que eso era lo que importaba. Pero no podía evitar sentir celos, no podía evitar preguntarme si Spreen había estado enamorado de T/N antes de que nosotros estuviéramos juntos.

Deje a Spreen con la palabra en la boca, no quería saber más sobre el tema, macerqué a T/N, que estaba arreglando a Sebastián, y sentí mi corazón a mil por hora. La sangre me hervía de enojo y celos solo de imaginar que Spreen pudiera decirle algo a ella sobre sus sentimientos.

Me detuve a su lado y miré a Sebastián, que sonreía inocentemente. T/N levantó la vista y me sonrió.

—¿Estás bien? —preguntó, notando mi expresión tensa.

La familia que siempre soñé | ROIER Y T/N <3 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora