Capítulo 22

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"El amor puede ser hermoso, pero también puede romperte en pedazos". Nayeli Cruz.

Liam Kozlov

Nos bajamos del auto y subimos a su departamento. Ella tomó mi mano como si no quisiera soltarla, y la entiendo. Yo tampoco quiero soltarla. Entramos a su casa y suspiro. Ha llegado el momento. Nos acomodamos en unos muebles, cada uno en uno, y la veo con una sonrisa antes de cerrar mis ojos.

—Sé que has estado buscando información sobre mí —sus ojos se abren, pero no la dejo hablar—. Interrumpí todas las búsquedas que hacías. Pero no empezaré por ahí.

«Cuando mi padre murió, bueno, en realidad lo mataron, mi vida se derrumbó en todos los sentidos. Cada uno de nosotros enfrentó el duelo de manera diferente. Alek tomó el control de todos los negocios y se convirtió en el líder de la mafia tras la muerte de mi padre. Alessandra tomó otro camino, llorando y llorando hasta que se cansó, cayendo en una depresión y ansiedad. Yo, por otro lado, un día, sin previo aviso, llorando por todo y con un feo dolor en el pecho, llegué a un lugar donde Max me encontró. Él me enseñó cómo desahogarme peleando, porque antes de eso, comencé a cortarme y a consumir drogas.

«Él me dio esa vía de escape a través de las peleas, donde podía liberar todo lo que sentía. Al final, se convirtió en un pasatiempo.

—Pelear no está mal... —susurra ella, aun procesando todo.

—¡No solo peleaba, Sara! —exclamo—. Yo los mataba, mataba por satisfacción. Soy un maldito asesino, maté a muchos solo para poder encontrar un poco de paz. Y sabes qué... ¡no servía de nada!

«No servía de nada, porque después seguía igual. Con el tiempo logré construir mi máscara, aquella que todos creían y aún creen. Sí, mi vida es una completa mentira con sonrisas falsas. Todo es una farsa para ocultar quién soy realmente. Porque si mostramos una sonrisa, todos piensan que estamos bien. Porque el mundo es tan hipócrita que todos fingen y les da igual.

«Llegué a un punto en el que el simple acto de matar ya no era suficiente. Matar se convirtió en un juego, como si fuera una fuente de satisfacción. Fue entonces cuando retomé las autolesiones, cortarme se convirtió en algo que me calmaba por un momento. Era calmar un dolor con otro dolor. Yo buscaba aliviar mi dolor mental a través del dolor físico. Y fue en ese momento, desde que entraste por última vez a mi baño y me dijiste: "Tu belleza no me asusta, Liam. Estaré contigo, te gusté o no", que supe que debía dejar de cortarme para escapar del mundo y del dolor por un instante.

«Lo más triste es que nunca nadie se preocupó por mí. Siempre estuve ahí para los demás, pero nadie estuvo ahí para mí. Sin embargo, cuando Marcos se dio cuenta de cómo me sentía, él y Claudia nunca me dejaron solo. Y Max, él se convirtió en mi figura paterna, siempre ha estado a mi lado en mis momentos más difíciles. Mis mejores amigos también han estado allí para mí desde que los tengo cerca. Al principio, ellos no sabían por qué lo ocultaba tan bien, pero todo sale a la luz eventualmente, y se dieron cuenta. Al final, logré tener su apoyo.

«En mi familia, nunca quise depender de ellos. Cada uno tenía sus propios problemas como para cargar con los míos. Mi madre se vio devastada por la muerte de mi padre, Alek asumió la responsabilidad de todos los negocios y Alessandra, siendo la más joven, también tenía sus propias luchas. No había forma de que pudiera contar con ellos, porque pensaba que sería una carga, una tontería enorme de mi parte.

«Cuando Isabella, mi cuñada, llegó a nuestras vidas, todo cambió para mí. Tenía a alguien con quien hablar sin miedo a ser juzgado. Ella sabía escucharme y cuando le conté todo esto, estuvo ahí para mí sin juzgarme. Fue hermoso sentir su apoyo y más aún cuando me aseguró que no era una carga.

«Linda también me hizo saber que en realidad no era una carga para nadie, al igual que tú. Tú me has visto en mis peores momentos y no sabes lo bien que se siente no ser rechazado por ser alguien que sufre de depresión, que se lastima físicamente para calmar su dolor emocional.

«Cuando sientes que ya no puedes más, el destino te envía personas que se convierten en tu luz, y tú, Sara, eres la mía. Llegaste un poco amargada, pero llegaste y has mejorado mi vida.

«Recuerdo tus cantos en el teléfono, tratando de calmarme.

—Say Yes to Heaven...

—Sí, recuerdo cada una de las canciones y cosas que dices, como tu amor por el chocolate blanco. Recuerdo cada maldito detalle de tu vida, Sara.

«Pero sabes lo que más me duele, es pensar en que tú me alejaras para pensar en todo esto, querrás alejarte de mí por ser quien soy. Porque soy un ser inestable que explota cuando llega a su límite. Pero que quiere ser mejor para ti. Sé que no puedo quitar el hecho de que soy un asesino, mi mundo es la mafia. 

«Pero antes de todo eso, yo era un chico cuyas sonrisas sí eran verdaderas, que no se cortaba para calmar un dolor con otro, que no se drogaba para no seguir en este mundo. Que cuya vida era alegre y la mejor de todas. Pero tan jodida que es la vida, que llego a cambiarla toda de un momento, para hacerme lo contrario y convertirme en quien soy, en la persona que soy, en un ser que lo único bueno en él es su corazón, que aún sabe querer bonito...

—Sabes, nosotros mismos nos convencemos de que somos malos, de que no merecemos nada bueno en este mundo, de que solo merecemos sufrimiento. Pero tú no mereces eso, lo único que mereces es ser feliz.

—No sé qué ves de bueno en mí cuando mi vida es un infierno lleno de oscuridad... —susurré con un nudo en la garganta, y vi sus ojos llenos de lágrimas. Ella se levantó de su asiento y tomó mis mejillas, sonriendo levemente.

—Liam, me enamore de tu lado oscuro, me importa una mierda lo que eres, me vale madres si eres un asesino, me enamore de tu infierno. Porque me importas tal y como eres.

—No deberías amar a un desastre como yo... —murmuré.

—Pero no puedo controlar lo que siente mi corazón. Solo necesito tiempo para comprender todo lo que acabas de decir, el hecho de que eres parte de la mafia a la que persigo. Es como estar entre la espada y la pared, amar mi trabajo y amarte a ti. Es muy difícil para mí. Quiero tu oscuridad, pero también amo mi trabajo, así que elegiré mi trabajo por un tiempo. Necesito alejarme de ti durante un tiempo. No puedo renunciar a lo que amo por ti, y tomaré prestada la frase de Max: primero yo y luego el mundo. Lo siento mucho, Liam. Pero necesito pensar y procesar todo...

—Viste, te dije que tú harías sangrar mis heridas de nuevo. Nos vemos, mi bailarina amargada... Es un hasta pronto, ¿no?

—No lo sé...

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Ansiedad

Tener ansiedad y depresión es como estar asustado y cansado al mismo tiempo.

Es el miedo que tienes al fracaso, pero no hay necesidad de ser productivo.

Es como querer amigos, pero odiar el socializar y las personas.

Es querer estar solo, pero no querer estar solo y estar acompañado.

Se siente todo a la vez.

Nayeli Cruz - Lazos ilegales

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HOLAAAAA, espero les gustaran los capítulos, perdón por estar tan perdida, pero estaba en exámenes y con un montón de tareas.

Nos vemos en otro capítulo.

Los quiere Nayeli

Un beso en las dos tetas je, je, je.

Lazos Tentadores (+18) #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora