11. Evento.

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-Hice un buen trabajo y solo recibo mi premio...

-¡Hey! ¿Me estas escuchando?- Minho chasqueó sus dedos frente a la cara del joven.

Landon salió de sus locas imaginaciones y las que no llegó a concretar.

-Estoy agotado- Dicho esto, se levantó y fue hasta su cama, donde se dejó caer.
Minho suspiró y se apoyó en la silla, notando recien una guitarra eléctrica a pocos centimetros suyo.

-¿Tocas?

Landon miró el instrumento y luego su atencion volvió a su teléfono celular.

-A veces.

Minho acercó sus dedos y palpó la guitarra negra con rayos dorados, a simple vista podía notar que el material era muy bueno y al ver la marca se quedó sorprendido, pues esa guitarra era de una edicion especial de colección.

-Landon, háblame de ti- Sugirió para aligerar la incomodidad.

-No.

-Ya que somos amigos, me gustaría
saber mas de ti. Despues de todo, eres el hermano de Chris.

-Dije que no.

-Okay... Creo que las clases fueron suficientes por hoy, yo me retiro- Minho se levantó y se marchó, agotado por el ambiente aun enrarecido que existía entre ambos.

*

Otra vez Chris se marchaba a la capital por un par de días. Minho no tuvo de otra que bajar solo a la hora del almuerzo.

La comida fue silenciosa, Minho no se atrevía a hablar, asi que todo se mantuvo callado.

-Oye tú- Minho giró cuando Jessica le dirigió la palabra por la tarde. -Ya que vives gratis en mi casa, al menos deberías ocuparte en algo, hay mucho trabajo que hacer.

-S-si entiendo. ¿Hay algo que pueda
hacer en esta casa?

-Tengo varias invitaciones que enviar,
podrías ayudarme con eso.

Minho aceptó y siguió a la mujer que
lo llevó a un despacho enorme. En el escritorio habían dos cajas llenas con hermosas invitaciones mandadas a hacer.

-Escribe aqui, quiero ver tu letra― Exigió
seria.

Minho lo hizo y apuntó lo mejor que pudo, con la pluma de tinta especial.

-Nada mal, al menos eres útil para
escribir. Escucha, esta es la lista de invitados, asi que escribe sus nombres
en cada invitacion, luego ponlas en estos sobres y déjalas listas para su envío- Ordenó Jessica.

-Si, señora.

-Bien. Empieza de una vez, yo saldré por algunas horas, asi que mas te vale terminar todo hoy.

Minho inició con esa tarea que al principio parecía sencilla. Al pasar las horas, la mano de Minho estaba entumida por escribir sin parar y sus ojos tambien ya se sentían cansados.
Como era de esperar, Jessica retornó y
al verlo aun escribiendo, lo regañó sin inmutarse de insultarlo de varias formas.

Minho se la pasó toda noche escribiendo y en la madrugada las guardó en sus sobres, con el remitente respectivo y las estampillas.

Jessica viajó a la capital, dejó una gran cantidad de las invitaciones en el correo y el restante se quedó con ella, ya que esas invitaciones las entregaría personalmente a los invitados que requerían especial atencion.

-Siga usted señora Bang, en un minuto el señor Asthor la atenderá.

-Gracias.

Jessica ocupó una mesa, en ese salon.
Mientras hacía tiempo, fue atendida pulcramente por los empleados del casino mas grande de la ciudad.
En ese salon, había algunas personas distinguidas que se tomaban el tiempo de relajarse en beber y probar bocadillos. Al fondo, en un espacio reservado para el entretenimiento, unos músicos tocaban una melodía suave y al centro se hallaba una joven rubia y de vestido rojo, que cantaba.

Jardín Azul-GardenverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora