El 1 de octubre de 1989, 43 mujeres dieron a luz pero ninguna de esas mujeres estaba embarazada en ese entonces.
El multimillonario Reginald Hargreeves, soborno a unos padres para adoptar a 8 de esos bebes, por tener habilidades fuera de lo común.
...
Después de haber peleado con los marines del bar, nos fuimos de ahí antes de que haya mas problemas y conduje hasta la tienda de donas. Me estacionó en un callejón al frente de la tienda, esperando a esos sujetos y oigo la risa de mi hermano.
- Eres un bocón ¿Lo sabías? - Le digo.
- Oh, wow. Pero que impactante revelación, Diego.
- Si, para ti todo es una broma, ¿No? ¿Qué haces? Dame eso - Digo al ver una droga en su mano y el hace un berrinche - ¿Por que estás tomando esta porquería?
El no dice nada, solo me ignora.
- Mira esto - Le digo dando unas palmadas en mi estomago - Mi cuerpo es un templo, todo eso que haces es pura debilidad.
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- Wow, muy lindo, pero... la debilidad es deliciosa - Lo veo con mas droga.
- ¿Qué diablos te pasa? - Le pregunto dándole un zape en la cabeza.
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- ¡No me pegues, tarado! - Me recrimina alzando la voz.
- Oye, no me digas que todo anda bien, ¡Por que te vi ahí dentro llorando como un bebé! - Le digo también alzando la voz.
- ¡Perdí a alguien, por eso! - Exclama y baja la mirada dolido - A alguien importante, perdí a la única persona que realmente amé más que a mí mismo.
Tras dicho eso, me quedo con la mirada perdida. Tiene sentido y de cierto modo lo entiendo, cualquiera puede actuar así por perder a alguien que ama, sientes muchas emociones a la vez y no sabes que hacer.
- Salud - Dice tomando su droga.
- Tienes más suerte que la mayoría - Le digo mas tranquilo - Y cuando tú pierdes a alguien, al menos puedes... verlo cada vez que quieras.
Después de la conversación, veo por el retrovisor y veo a uno de los sujetos saliendo de la tienda de donas y dirigiéndose a su auto.
