Breaking the Rules || RubegettaAU (Omegaverse)

Capítulo 15

Rubius miró a su pareja con curiosidad, hace algunos minutos habían llegado a la fábrica y ahora estaban sentados frente al Chamán en su sala de trabajo.

Su cuerpo aún se sentía agotado después de aquella carrera, así que no podía (o no quería) hacer nada más que dejar caer su cabeza sobre el hombro del Lobo, quién lo aceptó con gusto.

— Sapo, me gustaría entregarle su regalo a Rubius... — dijo Vegetta.

— Oh, el regalo, por supuesto.

Sapo Peta hizo una señal a uno de los goblins, quién salió de la sala y volvió unos minutos después sosteniendo una pequeña caja de madera en forma rectangular. El Chamán tomó el objeto para luego dejarlo sobre la mesa y extenderlo hacia el Oso.

Rubius miró la caja, luego a su pareja, quien le asintió con una sonrisa, y tomó el objeto. Dudó unos pocos segundos, pero luego se armó de valor y lo abrió. Sus ojos se iluminaron ante lo que estaba viendo, era una gema morada, la misma que los Lobos usan para entrar y salir de su territorio sin problemas, y lo más hermoso era que estaba tallada, la hermosa gema tenía tallado en él un bonito Oso.

Los ojos de Rubius estaban cristalinos cuando volteó hacia su pareja, una gran sonrisa adornando su rostro.

— Veg...

— Traté de hacerlo yo mismo, pero claramente no soy bueno en ese tipo de cosas. Y... te mereces algo hermoso, como tú, entonces le pedí ayuda a Sapo Peta... — confesó el Lobo con un leve rubor en las mejillas.

El Oso estaba al borde de las lágrimas. Su pareja estuvo ocupada todo este tiempo en sus deberes como líder, pero aun así hizo el esfuerzo de tallar una gema para él, incluso si sabía que no era bueno.

De repente, había recuperado todas sus fuerzas. En un segundo se lanzó sobre el contrario para besarlo profundamente. No le importaba tener público, él necesitaba urgentemente demostrar su gratitud al contrario...

— Te amo, te amo demasiado... — expresó el Oso entre jadeos, Vegetta no estaba mejor que él.

— Yo te amo mucho más...

El Oso giró rápidamente hacia el Chamán y lo apuntó con el dedo índice.

— Necesito que me hagas uno con esmeralda, quiero ver un Lobo tallado en él. Y dame la gema que Vegetta trató de tallar...

Sapo Peta soltó un resoplido divertido para luego asentir.

Ni Rubius ni Vegetta se esforzaron en ocultar su relación con el Chamán, ambos sabían que él guardaría el secreto, después de todo, él casi nunca salía de su fábrica.

El Chamán los miraba con curiosidad. Y sin pensarlo mucho, dijo: — Por supuesto, lo tendré listo para dentro de tres días. Pero antes de que se vayan, ¿Les gustaría que les diga lo que el universo tiene que decirles?...

El Oso lo miró con ojos brillantes mientras volvía a sentarse. Vegetta también miraba al Chamán con cierta curiosidad.

Sapo Peta nunca le ofrecía algo así a cualquiera, y con toda sinceridad, esto era más por satisfacer su curiosidad que ayudarlos, necesitaba saber qué pensaba el universo sobre su relación.