Capitulo 8

2.4K 251 17
                                    

"¿Por qué eres así?" Hadou se preguntaba mentalmente mientras observaba a Tamaki desde su pupitre. "Te comportas como un idiota y luego te escondes detrás de lo que le pasó a tu madre." La peliceleste sentía que definitivamente el chico era otra persona. "Jamás pensé que cambiarías tanto en tan poco tiempo, pero simplemente no puedo seguir esperando a que vuelvas a ser como antes, porque eso jamás pasará." Nejire comenzaba a aceptar que debía seguir adelante sin el chico, ella iba primero.

Ring

"¿Ya terminaron las clases?" La chica se preguntaría mientras veía la hora. "Debo ir con Midoriya." La peliceleste dejaría entrever una pequeña sonrisa que inconscientemente se había asentado en su rostro.

"¡Deku-kun!" Uraraka llamaría la atención del niño que guardaba sus cuadernos en la mochila. "¿Q-Qué ocurre Uraraka-san?" Izuku preguntaría con una gota de sudor recorriendo su frente. "¿Me podrías prestar tus apuntes de la clase de historia?" La chica sonreía un poco inquieta por la respuesta que podría brindarle el peliverde.

"C-Claro, no hay problema." Izuku respondería mientras sacaba su cuaderno de historia y se lo entregaba a la chica. "Aquí tienes todos los apuntes, esto abarca todos los contenidos desde el siglo XIX hasta mitad del siglo XX." El niño explicaría un poco emocionado, no podía ocultar su pasión por las ciencias sociales. "¡Gracias Deku-kun!" La chica sonreía alegre.

"Si tienes alguna duda puedes preguntarme, no tengo ningún problema." Izuku le regalaría una sonrisa a la castaña que parecía sonrojarse un poco. "¡N-Nos vemos luego!" La chica exclamaría mientras salía apresuradamente de la sala de clases. "¿Uh? ¿Hice algo malo?" El chico se preguntaría encogiéndose de hombros.

"Maldición." Ochako parecía estar teniendo una discusión consigo misma mientras se golpeaba la cabeza contra los apuntes del chico. "¿Estas bien Uraraka-Chan?" Mina preguntaría tomando por sorpresa a la castaña. "¡Mina!" La niña diría en voz fuerte un poco exaltada por la irrupción tan repentina de la chica. "¿Te gusta Midoriya-Kun?" Ashido preguntaría sin vacilar, sencillamente había sido tan directa que Ochako no sabía que responder.

"¿Q-Qué?" La castaña quedaría estupefacta por la pregunta de la niña que quizás era algo mal intencionada. "¡A mi no me engañas!" Jiro se uniría a la conversación mientras Uraraka sentía que estaba atrapada entre la espada y la pared...

"¡Llegas tarde Midoriya-kun!" Hadou le llamaría la atención al chico por su impuntualidad. "¡L-Lo siento Hadou-Senpai!"  Izuku pediría disculpas. La chica como de costumbre, solo le estaba tomando el pelo. "Estas jugando con mi tiempo ¿Sabes?" La Peliceleste diría intentando aguantar la seriedad. "¡Perdón! Es solo que me retrasé un poco por que Uraraka-san me había pedido mis apuntes, ¡Le juro que nunca más volvera a pasar!" El chico le daría la explicación pertinente a Nejire que solo se reía del pecoso en su cara.

"Fiuu~" La chica soltaría un suspiro. Se estaba convirtiendo en un pasatiempo jugarle bromas a su Kohai, que, para variar, siempre caía. "Hablando en serio, podría jurar que le gustas a esa chica." Nejire comentaría cambiando drásticamente su expresión, dándole más seriedad al asunto. "¿¡Que!?" El peliverde totalmente desconcertado se quedaría estático, casi como si fuera un poste de luz.

"Jijiji, es broma tonto Midoriya-Kun. Ni siquiera la conozco como para decir eso." Otra vez izuku había caído, quizás la chica era muy persuasiva, o por el contrario el era muy persuadible, no había certeza, la única certeza ahora mismo es que, quizás no de la manera que le gustaría, estaba haciendo reír a la chica.

"E-Es malvada Hadou-Senpai." El pecoso diría un tanto avergonzado. "¡Vamos! ¡Vamos! Hay que comenzar con el entrenamiento." ¿Acaso había escuchado mal? ¿Ella estaba siendo enérgica? Le daba igual esas preguntas ahora mismo, la sonrisa dibujada en su rostro no se la quitaba nadie. "¡Por supuesto!" Izuku respondería mientras acompañaba a la chica con el entrenamiento.

2 horas después

"¡Daaa!" Hadou le sacaría la lengua en señal de burla. "N-No sabía que usted era tan intensa." Mentía, desde siempre supo que era intensa. "Aún tienes mucho que mejorar, Mirio es un idiota, solo entrena un grupo muscular cuando deberías encontrar un equilibrio, que patético, si tú estuvieras bajo mis entrenamientos siempre, ya serías seguramente 20 veces más fuerte que ahora." La chica alardeaba en desmedro del rubio que podía jurar que en este preciso momento estaban hablando mal de el.

"Tienes suerte de que hayamos terminado, eso es todo por hoy." Nejire comentaría. Izuku lo único que quería ahora mismo era un buen chocolate caliente y su cama, lástima que el destino tenía otros planes para el...

Por eso vineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora