Capitulo 34

1.3K 136 18
                                    

No habían palabras para describir lo que sentía en este preciso instante, era una mezcla de sentimientos explotando como fuegos artificiales dentro de su corazón. "Midoriya-Kun..." Estaba totalmente embobada mirando al chico, quizás le había aturdido un poco ese beso. "Yo lo hice... Yo lo logre." El peliverde diría mentalmente sin despegar su mirada de la niña.

"Grr." La castaña soltaba un gruñido debido a la impotencia que sentía en estos momentos luego de presenciar tal acto de amor. "No te preocupes Uraraka, no lo hagas, que disfrute por que dentro de poco le quitaré esa estúpida sonrisa de su rostro." Ochako diría para si misma mientras se tomaba un shot para pasar la rabia que sentía.

"Jiji." Hadou dejaba escapar una risita comenzando a bailar apegada al peliverde. "N-Nejire-Chan." Izuku había vuelto, y con el   su nerviosismo y timidez habitual. "Shh~." Nejire lo mandaba a callar con un beso. Podían cuestionar su método más no su resultado que fue totalmente efectivo, era como ponerle un tete a un bebé para que dejase de llorar.

"N-Nejire-Chan s-si tu sigues haciendo eso y-yo..." El chico se refería a que si ella seguía moviéndose de esa manera tan apegada a él, iba a provocar una reacción un tanto vergonzosa para el peliverde. "¿Uhm?" Nejire sabía lo que estaba provocando, no era tonta, ella quería eso y no iba a detenerse al menos de que el chico se lo pidiera, pero como ese no era el caso...

"Mmm~." Lo había conseguido y ahora podía disfrutar de ello; se mordía el labio victoriosa, todo lo contrario al chico quien no sabía dónde meterse e imploraba alguna salvación. "M-Mierda no se baja." Izuku se lamentaba, rogaba por que Mirio viniera a salvarlo pero eso no iba a suceder. "Jiji." Ella se había detenido para mirarlo directamente a los ojos con una sonrisa angelical, aunque detrás de esa sonrisa podía jurar que había algo aún más profano de lo que podía imaginarse.

"Necesito ir al baño, ¿Puedes esperarme aquí?" La peliceleste preguntaría con las manos detrás de la cintura. "C-Claro." Izuku respondería un tanto aliviado al ver como la chica se iba a retirar por unos minutos. "Ya vuelvop." Nejire diría dándole un beso en la mejilla retirándose del lugar. "Uff~." El peliverde dejaba escapar un suspiro.

"Muy bien, es el momento." Ochako diría disolviendo la pastilla en el trago mientras caminaba hacia donde se encontraba el pecoso. "Hola Deku-kun." La castaña saludaria con un dulce tono de voz. "H-Hola Uraraka-san." El peliverde respondería nervioso, el no quería que ella viera su erección, de lo contrario podían sepultar su tumba ahí mismo.

"¿Quieres?" La niña ofrecería un shot mientras el pecoso con tal de que no vieran su evidente erección aceptaria. "G-Gracias." Izuku agradecía tomándose al seco el licor; no tardaría en sacar la lengua hacia afuera y sacudir la cabeza por lo amargo que era. "¿Estas solo? ¿Y Hadou-Senpai?" Ochako preguntaría con una sonrisa siniestra en su rostro.

"Ella fue al baño." El chico explicaría algo atontado. "Ya veo, entonces estamos solos tu y yo..." La castaña diría acercándose peligrosamente al peliverde. "Se un buen chico." Ochako ordenaria ante la mirada confundida del peliverde. "¿Que? ¿E-Estas bien Uraraka-san?" Izuku preguntaría con una gota de sudor recorriendo su mejilla.

"Mierda, quizás fue demasiado poca la dosis, seguramente no le hizo efecto" La niña diría mentalmente mientras entraba en pánico sin saber que hacer, el plan al parecer había fallado. "C-Creo que me siento un poco mareada, debí haber bebido demasiado, y-yo voy al baño, nos vemos luego." La chica se inventaba una excusa dejando tirado al peliverde que estaba totalmente desconcertado por lo ocurrido.

"Que raro..." Izuku diría sintiendo un pequeño hormigueo en todo su cuerpo. "Maldición, casi lo hecho todo a perder." Uraraka se maldecía, no estaba para nada contenta con lo sucedido y se notaba con solo ver su rostro.

"¡Volví!" Nejire diría llamando la atención del peliverde que parecía estar totalmente estático con un vaso vacío que indicaba que había bebido. "¿Uh? No pensé que fueras a beber, pero si ese es el caso..." La peliceleste dejaba entrever una sonrisa mientras hacía lo propio comenzando a tomar vaso tras vaso. "¿Quieres otro Midoriya-kun~?" Hadou le preguntaría al niño que volteaba a verla.

"Buenop." El peliverde respondería como si estuviera en piloto automático. "Jiji." Nejire reía por el comportamiento del chico que se tomaba el shot al seco. "Vaya vaya, ¿Otro~?" Para ella todo esto era un juego, aunque claro está no tenía ni la menor idea de que para el pecoso no era más que una orden que le imponía al momento de consultarle algo.

"Si porfavor." Izuku respondería nuevamente como un piloto automático. "Jiji, eres tan dócil Midoriya-Kun." El era dócil, realmente lo era, pero ahora era diferente, el estaba bajo los efectos de la escopolamina, una droga que provoca una parálisis mental haciendo que el individuo sea totalmente dócil y sumiso ante la persona que le ordena o pregunta algo, usualmente es ocupada en casos de violación, entre sus otros efectos también está la amnesia.

Ahora el estaba drogado y borracho. "Midoriya-Kun~ bésame." La niña ordenaria totalmente alcoholizada, aunque para su sorpresa el chico obedecería sin rechistar. "Uhmmm~..." De algún modo le fascinaba está actitud tan repentina del peliverde. "Mi pequeño Kohai~." Nejire diría con una risita tonta. "No sabía que eras tan atrevido~." Definitivamente estaba totalmente borracha.

"Mmm~ aquí hay mucho ruido, ¿Quieres ir afuera?" Era una mala idea, definitivamente lo era, estaba nevando y ella tenía un vestido ajustado y revelador, no estaba hecho para bajas temperaturas. "Esta bien." Hadou no lograba darse cuenta de que algo estaba mal en el niño, puesto que de por sí el siempre solía ser dócil con ella lo que dificultaba mas la situación.

"¡Hace mucho fríooooo!" Nejire se quejaba mientras tiritaba del frío, después de todo era normal, ¿Que clase de persona con un apice de raciocinio salía así de desprotegida con esas temperaturas? Al parecer solo ella. "Mejor vamos a mi habitación." Hadou sugería mientras el peliverde la seguía como un perro a su amo.

"Maldita sea, no puedo creer que haya salido mal, soy estúpida, pero siempre hay segundas oportunidades, está vez si será suficiente la dosis de escopolamina para poder tener el control de Deku-kun." Uraraka diría con una sonrisa perversa e inquietante. "¿Que tú harás que?" Una voz detrás suyo la alertaria, habían escuchado su plan y eso no era bueno.

"¿Mirio-Senpai?" Ochako preguntaría. El era la persona menos idónea, el no podía contarle eso a izuku de lo contrario lo perdería todo...

___________________________________________

Hola a todos, solo quería decirles que mis vacaciones de invierno han terminado y por ende seguramente baje la frecuencia de capítulos que venía trayendo las últimas semanas debido a que tengo menos tiempo. A medida que logré administrar bien mi tiempo actualizaré más seguido, ya que tengo que coordinar mis horarios de estudio y las clases de la universidad. Haré todo lo posible por actualizar aunque sea una vez al día, pero no se preocupen que está historia tiene para rato y no pienso tirarla a la basura, cuando empiezo algo siempre lo termino así que no hay de que preocuparse, sin más, nos vemos en el próximo capítulo 🫡

Por eso vineDonde viven las historias. Descúbrelo ahora