Capítulo 91

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Ahí estaba el otra vez, ¿Por qué siempre aparecía cuando más lo necesitaba? ¿Por qué siempre estaba con una sonrisa? El sabía el porqué; Su incompetencia, su ingenuidad, su exceso de confianza, siempre había algo que de una o otra forma lo ponía en esta situación, pero Lemillion, a diferencia de él, no carecía de esos elementos, era un héroe mucho mejor que el, no importaba que hubiera una diferencia abismal en cuanto su nivel de poder, el seguía siendo mejor.

Por fin lo había entendido, todo este tiempo se esmeraba en perseguir una versión de el más fuerte que la anterior y se olvidó por completo de pulir los pequeños detalles que marcan significativamente la diferencia. Si tan solo el hubiera acabado con Shigaraki cuando tuvo la oportunidad, nada de esto hubiera sucedido, su ingenuidad lo puso en esta situación y ahora era Mirio quien tenía que pagar el precio de aquello.

"¡Sal de mi camino!" Shigaraki exclamaría, creando un enorme puño listo para impactar de lleno al rubio que sonreía con total confianza. "¡Muere!" El villano exclamaría, impactando el golpe y destruyendo el pavimento en lo que creía que habia acertado con su objetivo. "Hey, estoy aquí, villano malévolo." Mirio comentaría, dándole pequeños toques en su hombro para que el peliblanco se diera vuelta.

"¡Tsk! ¿Te estás burlando de mi? ¿Quien te crees que eres? Pedazo de basura." Tomura preguntaría mientras una aura morada envolvía todo su cuerpo. "Yo soy Lemillion, el héroe que salvará a un millón de personas." El rubio respondería, regalandole una sonrisa a la vez que se apuntaba con su dedo pulgar a si mismo e inflaba el pecho de orgullo.

"¡Me importa un carajo como te llamas! ¡Muere de una vez por todas!" El villano exclamaría, intentando tocarlo para usar desintegrar ahora que Eraser estaba ocupado en sus propios asuntos según lo que Spinner había comentado. "Demasiado lento, jiji." Mirio diría con una risita de por medio al ver como el peliblanco traspasaba completamente su cuerpo en el intento por tocarlo.

"¡Ahhhhh! ¡Muere de una vez por todas! ¡Eres tan molesto! ¡Deja de huir como una rata!" Shigaraki ordenaría completamente sacado de sus casillas. "Pensé que estábamos jugando a las atrapadas, mi error." Lemillion contestaría con una risita burlesca mientras seguía esquivando los intentos de tocarlo por parte del villano.

"¿El está regalandome tiempo para recuperarme? ¿Cómo no me dí cuenta desde un inicio? Es imposible que el pueda pelear de igual a igual contra Shigaraki, es consciente de sus limitaciones." Izuku pensaría mientras observaba el pequeño combate. "Eres increíble, bro. No pienso desperdiciar esta oportunidad que me estás brindando." El pecoso diría mentalmente, dejando escapar una sonrisa.

"¿Es que acaso solo sabes huir?" Tomura cuestionaría ya cansado de la situación. "Solo estoy esperando el momento adecuado, mameluco." Mirio respondería con tranquilidad. "Lo había olvidado por completo, aún conservo ese don." El peliblanco diría mentalmente mientras colocaba sus dos manos en el suelo. "¿Eh? ¿Por qué no funciona?" Shigaraki se preguntaría al ver que la peculiaridad que deseaba emplear no tenía efecto alguno.

"¡AHHHHH! ¡TÚ OTRA VEZ!" El villano gritaría completamente furioso, las pupilas de sus ojos parecían vibrar mientras miraba a todas las direcciones en búsqueda de Eraser-head. "¡Ahora!" El rubio exclamaría, dándole la señal a Izuku que activaba el quirk del 2 portador, comenzando a correr en círculos alrededor de Tomura, rociando en el camino su humo morado.

"¡Gagh!" Shigaraki escupiría saliva al recibir un Upper cut por parte del rubio, seguido de un rodillazo en el estómago. "¡Te mataré maldito!" El peliblanco aseguraría completamente furioso mientras el chico desaparecía entre el humo que lo rodeaba. "¡Aquí estoy!" Lemillion llamaría su atención apareciendo frente a él.

Tomura sin perder segundo alguno se lanzaría contra el chico que activaba su permeabilidad haciendo que pase de largo, pasando al otro lado del humo, siendo recibido por ansioso un peliverde que lo estaba esperando con un puño que impactaría de lleno en su rostro, llegando a romperle la mandibula y antes de siquiera salir disparado seria envuelto por los látigos negros del chico que lo mantenían inmovilizado.

"¡Smash!" El pecoso exclamaría. "¡Bro!" Lemillion terminaría la frase en lo que era un ataque combinado por parte de ambos hacia el villano que estaba recibiendo una paliza y humillación por parte de ambos héroes que parecían estar luchando en perfecta sincronía, imposibilitandole al peliblanco tener oportunidad alguna de contraatacar o siquiera defenderse.

"¡Maldita sea! ¡Esto no puede estar pasando! ¡Maldición!" Tomura se lamentaba mentalmente al no poder hacer nada. "¡Está vez no pienso dejar pasar la oportunidad!" Izuku exclamaría, preparando su ataque final contra el villano que... ¿Comenzaba a tener miedo? ¿Era eso lo que estaba sintiendo en estos instantes? "¡Acaba con el, bro!" Mirio gritaría antes de que el pecoso lanzará su golpe final.

"¡United States of Smash!" Y al fiel estilo de All might replicaría el mismo golpe que mando a One for All a Tártaro. Impactando en todo el rostro del peliblanco que se desfiguraba por la cantidad de daño que había recibido. Esté crearía una impresionante onda de viento que despejaria el área, mandando a volar a todos los héroes y villanos que se encontraban a los alrededores.

¿El resultado? Era más que claro. Shigaraki se encontraba completamente inconsciente en el suelo mientras su boca se llenaba de espuma. "L-Lo logramos, Mirio." Izuku diría con una sonrisa llena de alivio mientras giraba su cabeza para ver al chico. "Fuiste un inútil hasta el final, Tomura. Es mi momento de colocar las cosas en su lugar." La voz sombría y tétrica del rey de las tinieblas resonaría como un eco en la cabeza de Tomura que perdía el control absoluto de su cuerpo.

"¡MIDORIYA!" Un grito desesperado del rubio alertaría a Izuku de un mal presagio. No fue más de un segundo el transcurso en el que volvió a dirigir nuevamente su mirada hacia el cuerpo de Shigaraki; fue el suficiente tiempo como para que unas fibras estuvieran a escasos metros de impactarlo.

Y entonces, cuando otra vez su incompetencia e ingenuidad le habían pasado factura, llegaría otra vez él para salvarlo, como siempre... En un abrir y cerrar de ojos el aparecería al frente suyo cubriéndolo del ataque, recibiendo de lleno las fibras del villano que atravesarían su cuerpo. Una imagen imborrable se transmitiría por sus ojos mientras su cara quedaba empapada por la sangre de su propio compañero y amigo.

Estaba paralizado, en shock, su reacción era genuina. Entonces el giraría su cabeza para regalarle una enorme sonrisa seguido de unas palabras. "Es lo que hacen los amigos, ¿No?" Mirio preguntaría antes de caer al suelo inconsciente por la perdida de sangre. "Ah... Ah... Ah... ¡TE MATARE!"...

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Mirio el verdadero goat de esta historia, no ofrece discusión.

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