Capitulo 30.

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El clima lluvioso y nublado había permanecido desde el día en el cual Porchay y Macau nuevamente volvieron a verse, Porchay y Macau regresaron a una mansión menor restaurada por completo pero en diferentes habitaciones, esto con la única intención de que no exista un toque debido al desconocimiento que tenían sobre sus experiencias. 

Los ojos de Macau se abrieron con lentitud ante la luz de la habitación, aunque se encontraban desorientados. Aquel desmayo que había sufrido había sido a consecuencia de la sangre que había perdido durante el tiempo que había estado encerrado y su nula alimentación durante el tiempo que estuvo prisionero, había estado dormido varios días. 

Se sentía como en un sueño; estar en casa de vuelta, una casa que lo ultimo que supo de ella es que había sido destruida por capricho de uno de los integrantes de la familia principal y lo mejor de todo, sus manos ya no se encontraban encadenadas y podía disfrutar de una cama suave e incluso de ropa decente puesta sobre su cuerpo.

Su vista viajo a cada uno de los espacios de la habitación donde se encontraba, cada uno de los muebles y marcos que se encontraban en el mismo eran diferentes, a simple vista podía entender que esta no era su habitación pero tenia el ligero presentimiento de que había tenido un toque femenino aquel arreglo. Sus ojos inmediatamente vieron sus extremidades, su brazo tenia varias vendas sobre si además de tener consigo el monitor que informaba sobre su pulso además de estar conectado al suero, tenia sus muñecas vendadas de igual forma su pecho y espalda, fácilmente podía recordar lo que había padecido.

El sonido de la puerta lo alerto, aunque tenia el presentimiento de que se trataba de Kinn o Pete, cayo en una evidencia equivocación. Aquella imagen encajaba con una mujer, con un vestido colorido y largo que aunque entallaba su cintura, hombros y pecho, se encontraba suelto del resto hacia abajo luciendo auténticamente como una ama de casa. 

Los ojos de Macau viajaron a la bandeja que esta traía, bebida y comida podía verse encima de el, y una sonrisa se dibujo en su rostro con la esperanza de poder consumir ahora tranquilamente alimento que se le era arrebatado cada vez que Kim deseaba.

- Tenia la esperanza que el día de hoy despertaras y tuve el atrevimiento de prepararte personalmente esto.

Macau desvió su mirada de la comida y subió su mirada para ver el rostro de aquella mujer que se había situado a su lado con cierta distancia, como si tuviera miedo de la manera en la cual el fuera a reaccionar. Observo fijamente el rostro de aquella mujer con cierta desconfianza, pero tampoco iba a mentirse a si mismo con la belleza encantadora que tenia aquella mujer, pero era una belleza que presentía haber conocido antes. 

La primer pregunta salió de los labios de Macau sin esperar a que ella hablara.

- ¿Por qué eres tan similar a Vegas?

Roselyn se encontraba en aquella habitación actuando y vistiendo como aquella madre que le había dado la vida a los pequeños Macau y Vegas, podría ser una empresaria multimillonaria fuera de su familia, pero al final de cuenta era una madre y ahora lo estaba siendo. 

- ¿Por qué dices que me parezco a Vegas?

El tono de voz que estaba utilizando Roselyn era bastante suave y comprensivo, aunque antes de decir la verdad, necesitaba hacer que Macau sintiera un poco de confianza hacia su persona. 

- Ahora que te veo, tienes un gran parecido conmigo y con Vegas, tienes la misma mirada retadora que mi hermano. 

- Tu hermano debe ser muy guapo, ¿no?

- Claro que lo es, ¿a quien no le gustaría Vegas? 

- Me gusta la forma en la cual hablas de tu hermano mayor, eso quiere decir que el amor se hermanos se ha mantenido en sus corazones. 

"i can be a better boyfriend" - MacauChay.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora