"i can be a better boyfriend" - MacauChay.

Capitulo 32

Antes de la recuperación de Macau y Porchay.

Las personas que son una sombra, pueden destruir a aquello que los destruyo.

Las puertas del despacho de Kan se habían vuelto a abrir, después de meses en completo silencio y con una reciente destrucción por aquel atentado que había sacudido completamente la mansión de la familia menor, aun podía verse los escombros en lo que fue alguna vez una alfombra que dejaba ver la elegancia en la misma. 

Roselyn era la única persona que se encontraba en aquel lugar oscuro y destruido, observando cada pedazo de escombro que aparecía frente a sus ojos, aun recuerda la noticia en los medios nacionales y internaciones de la muerte de su esposo, y aunque quería llegar inmediatamente al que fue su hogar y el hogar de su familia, sabia que no podía hacerlo. 

Roselyn sabia que se arriesgaría demasiado regresando antes del tiempo estipulado. 

- No esperaba que tuviéramos que vivir ese tipo de sacrificio, mi querido Kan.

Aunque todo el lugar era un sitio lleno de destrucción, vidrios rotos y caos, aun podía recordar cada detalle como la ultima vez que estuvo en ese lugar con su esposo, acompañado de sus hijos, la silla giratoria que siempre era utilizada por Kan, aun en su mente vivía el recuerdo que tenia de el sobre esa silla, su mirada no se despegaba de esos documentos sobre negociaciones y ofertas que la empresa recibía en busca de una sociedad con ellos. 

El aire que entraba a aquella habitación destruida generaba un ambiente fresco ante la tensión que aun podía sentirse en aquella habitación, podía sentirse una tensión de humillación y molestia resguardada por los individuos que habían sido testigo de aquellas injusticias. 

Pero incluso con la molestia andante, aun podía recordar lo que fue antes de convertirse en lo que era antes de eso. 

Una silueta femenina se dibujaba en sus recuerdos, y el sonido de los tacones lo acompañaban pero se sentía tan diferente a la persona que se encontraba en aquel momento, pero ese era el lugar seguro de Kan, por alguna razón, Kan podría soportar cualquier cosa por aquella mujer que se encontraba detrás de el. 

- Kan, ya es hora de comer. Vamos, Vegas y Macau ya te están esperando en la mesa. 

- Rose, ¿lograste terminar lo que te pidió Korn anoche? Si no.. 

- Lo termine, solo pude dormir una hora pero al menos no lo usara como una razón para humillarme ante todo el consejo. 

- Sabes que siempre encontrara razones para hacerlo, incluso puede utilizar el hecho de que estas casada con un tonto como yo. 

Con pequeños y suaves paso se acerco a su esposo, quedando en aquel respaldo del asiento que solo ocupaba Kan y coloco sus manos en sus hombros con una sonrisa, intentando tranquilizar sus propios pensamientos. 

- ¿De que hemos hablando, Kan? 

- ... 

- Kan. 

- De que yo no soy el problema, el problema es mi familia. 

- Muy bien, Kan. Nunca me he avergonzado de casarme contigo, tu familia pisotea todo aquello que vean, eso es lo que hacen contigo y conmigo a la vez. 

- Así que deja de pensar en tonterías, Kan. Vamos a la mesa, antes de que Vegas también decida venir por ti, a tu despacho. 

Una sonrisa se dibujo en los labios de Kan, sabia que no todo se encontraba perdido, se levanto de su asiento, y sujeto la mano de su amada esposa que se encontraba frente a el con una sonrisa mientras que mutuamente no se dejaban de mirar con cierta admiración y fortaleza, aunque Roselyn quisiera ocultar los moretones, Kan podía verlos a simple vista incluso si fueron tratados con maquillaje.