POR LA LUNA, SERÁS MÍA © | Completa |

Capítulo 6

Cap.6: “Destino”

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KLOÉ

¿Ese quién se cree?

¡Maldito lobo o lo que sea!

No podía quedarme en la cocina, viendo como estúpida al suelo, llena de miedo por haber escuchado su aguda y potente voz. Así que, fui caminando por todo el Palacio y verdaderamente es gigante e inmenso. Me topaba con raras personas, quienes usaban trajes de guardia de acero, con espadas y todo.

Habían en la entrada, luego del salón, dos lobos sentados en cada lado. Su pelaje era gris pálido, casi blanco. Sus ojos dorados como los que antes vi en Emmett y unos largos colmillos sobresalientes de sus hocicos.

Al verlos me ericé completamente, son grandes y muy robustos.

Todo parece sacado de internet.

Mientras caminaba entre ellos, todos sin excepciones bajaban sus cabezas en reverencia a mí. Yo no podía hacer más que sonreír forzado o simplemente, desaparecer con todas mis mejillas coloradas.

¿Qué les pasa? No hagan el ridículo.

Detrás de todo esto, se escuchaban sus murmullos.

Luna.

Ya no sé ni qué pensar.

— Así que tú eres Klodette.— a lo lejos estaba una chica rubia sonriendo hacia mí, apoyada a una columna con los brazos cruzados.

Tenía unos hermosos rizos, ojos verdes y cuerpo de diva. Inevitablemente me recuerda a Amy.

Usaba unos pantalones cortos y unos zapatos negros; una blusa de tirantes que dejaba al descubierto parte de su hermosa piel blanquecina. Y en su brazo traía un tatuaje, igual o similar al de Gabby; pero éste tenía más aspas y un signo de luna creciente en medio.

Así que éste es el supuesto pueblito donde Gabriella se tatuó.

— Sé que no intimido nada. ¿Lo podré usar a favor para hablar?— Dijo divertida mientras caminaba en mi dirección.— Soy Daysi, hermana de Emmett.

Con razón el parecido.

Me alejé un poco y tomé una posición defensiva. Ella alza sus manos en son de paz y me mira con respeto.

— Tranquila, no soy igual de estúpida como lo es Emmett.

Relajo un poco mi cuerpo sin dejar de verle.

— Kloé— dije bajo— dime Kloé.

— ¡Ay al fin estás aquí!— chilla de emoción,  me sorprendió como se me acercó a estrecharme en un abrazo.

— ¿Habrá alguien cuerdo aquí con el que hablar?

Daysi se quedó viéndome con una media sonrisa, la cual poco a poco desaparecía de sus labios.

Miraba el suelo mientras jugaba con su pie y un suspiro abandonó su cuerpo en el momento que me vuelve a enfocar.

De alguna manera, la chica me inspira confianza y no entiendo por qué.