45

2.5K 231 83
                                    

WEDS POV

El día siguiente llegó rápido.
Me quedé viendo el techo de mi
habitación mientras acariciaba la
cabeza de Max. Repase lo sucedido
del día anterior, parecíamos una
pareja en la galería. Y me sentía
bien tenerla cerca, así que decidí no
pensar en lo que pudiera pasar con
ella en mi departamento.

Al final quedamos que a las 5 de la
tarde nos veríamos, yo prepararía
la cena e iría por ella a su hotel.
Decidí hacer una pechuga de pollo
con especias y espagueti en una crema blanca.

Me duché, me aliste y salí al
supermercado para comprar lo
necesario para la cena, incluyendo
el vino. Volví a casa a las 3 de la
tarde. A las 4:55 ya estaba afuera
del hotel de la rubia. Le mande
un mensaje con mi llegada y me
contestó un "ya bajo". A las 5:05 la
vi salir por las puertas eléctricas. Y
sonreí. Subió al auto y me sonrió.

- Hola.

-Hola, ¿descasaste?- pregunté
antes de arrancar el auto.

- No tan bien como en mi propia
cama, pero si, gracias- asentí- ¿tú qué tal?

-Bien- le sonreí.

Llegamos rápido a mi edificio en un silencio cómodo. Subimos hasta mi
piso y abrí la puerta.

- Bienvenida, siéntete como en tu
casa.

La invité a pasar y sonrió entrando.
Cerré la puerta y la observé mirar
todo el lugar.

-Que bonita decoración.

-Gracias, lo que más me gusta es
la pintura de mi sala.

Dije sin pensar, causando que me
mirara y que después caminara a
la sala para ver su cuadro. Pude
ver cómo su boca se entreabría,
sorprendida. Su firma se podía
ver fácilmente en la parte inferior
derecha, así que no se podía negar
que era de ella.

Me quedé a unos cuantos pasos atrás de su lugar, viendo su reacción con las manos en mis bolsillos, esperando a que preguntara cómo la había
conseguido.

-¿Cómo?- alce ambas cejas-
¿Cómo es que tienes mi cuadro?-
pregunto viéndome.

-Viniste a una exposición hace
2 años- asintió esperando a que
continuara- fui y lo compré.

-¿Qué?- frunció el ceño-
¿Cómo es que fuiste y no me dijiste?
Mejor dicho ¿cómo no te vi?- me
encogí de hombros.

- Yo si te vi, solo que no dejé
que me vieras. Pero vi todos tus
cuadros, y ese fue el que más
me cautivo de todos. Tuve que
comprarlo, y así lo hice.

Volvió su vista al cuadro. Yo la vi
procesando la información recién
obtenida.

- Este fue uno de los que más me
gusto también- dijo en voz baja.

Sonreí de lado sin que me viera y
decidí cambiar de tema.

-¿Tienes hambre?- pregunté
yendo a la cocina.

La sentí seguirmne, abrí el vino,
saqué dos copas y lo serví
tranquilamente. Agarre una y me
di la vuelta para extendérsela. La
tomo rozando nuestras manos. Nos
miramos a los ojos sin que quitara
mi mano.

¿Por qué lo hice? No lo sé.

La solté pocos segundos después y
tomé un gran trago de la mía.

-Entonces... ¿tienes hambre?-
volví a preguntar recargada en la
encimera.

-¿Vas a cocinar de verdad?-
pregunto alzando una ceja risueña.

My Woman, My Love. |Wenclair G!P|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora