De esclavo a tú tentación

...su puta, eso nada más!

"Samir me hacía suyo  apasionadamente por primera vez, me acariciaba la espalda y se recostaba  encima de mi para morderme la oreja mientras decía,

—Eres mío... eres mi hembra!"

—Martin aterriza, tenemos clientes esperando, apúrate!!!— ordenó mi jefe aplaudiendo y gritando.

—Si Sr. Pino! ...Enseguida!— y en un esfuerzo por ser cortes dije,

—Bienvenidos a "Big Drunch, la sabrosa tentación". ...Puedo tomar su orden?—

—Obvio, no vine a ver tu cara de lerdo!— respondió la cliente con sarcasmo y agregó,
...dame un combo 3, un dulce de leche , una soda, ahh y que las papas fritas no estén quemadas como la última vez.

—Por supuesto, lo desea para llevar o comer aquí? le gustaría...?—

—Aquí, y no me ofrezcas nada! eso es todo!!!— agregó interrumpiendo la "dulce dama"

—Perfecto, en un momento la llamarán por su números de orden,  disfrute su tentación, feliz noche!

—...por que contratan a estos idiotas?— le escuché murmurar a su acompañante mientras el siguiente cliente tomaba su lugar.

—Bienvenidos a "Big Drunch, la sabrosa tentación". ...Puedo tomar si orden?...—

Este trabajo era una especie de cámara de tortura moderna, un bucle de tiempo en la que las horas descansaban y no avanzaban.

—Martin quieres que te cubra, no te ves muy bien— me preguntó Giro.

Se podría decir que Giro es un compañero de celda en esta prision, aunque fuera de ella se ha convertido en un verdadero amigo.

Él tiene 23 años, de piel bronceada, 1,80 de alto, cabello negro  casi rapado, buena gente y con un aire lindo.  Al igual que yo, él y su nueva novia atravesaban por una situación económica difícil.

Sin mucha discusión acepté el ofrecimiento de Giro, quien entró dos horas antes para que yo saliera más temprano ese día. 

Esperando en la parada de bus con la mirada perdida en la pantalla de mi celular,  aún podía recordar cuando Samir me dijo...

"De saber lo puta que eras ...te hubiera invitado a "dormir" desde hace tiempo!"

En todos los  años escondido en los que soñé  ser su esclavo sexual, nunca imagine el precio que pagarían por hacerlo realidad.

La soledad, la humillación, pero sobretodo la decepción que te carcome desde adentro, no era lo que esperaba y aún no lo puedo superar.

A tres años de haber vivido  la época más excitante de mi vida, no entiendo que paso, y por qué todo cambio,  fui yo? ...Ines o alguien más? ...que estará haciendo Samir?

Aveces lo imagino con esa sonrisa cautivante y sus grandes ojos adormecidos, su expresión de picardía que siempre me indicaba lo que quería y me estrelló con la cruel verdad.

Samir me llevo al cielo y me dejo creer que era especial para él, que era más que un simple amigo con derecho.

Me creí  tan bien el papel de esclavo sexual, que aveces me cogia sin ni siquiera "un hola, cómo estás?" Bueno... quizás aquí estoy haciendo drama porque lo disfrutaba.

Pero, todo lo que temía y por lo cual prefería fantasear en la seguridad de mi habitación, se hizo realidad.

Me lanzo  a los demonios y cuando más lo necesite no estuvo presente. Él sabía lo mucho que significaba "ella" para mi, y no le importo, ni siquiera apareció.