De esclavo a tú tentación

Pastel de piña

El dulce aroma a pastel de piña me despertó, pero... "donde estoy?"— me pregunté tratando de sentarme con dificultad en una gran cama pues el dolor en el abdomen era bastante.

Veo por la ventana a mi lado y es de noche, entonces comienzo a recorrer con la mirada la sencilla habitación en la que me encuentro. No es muy grande,  pero tiene un gran TV en la pared que predomina al igual que la cama, una chaqueta de cuero en un perchero, un par de pesas en el suelo, un espejo detrás de la puerta y el closet abierto.

También podía percibir en la habitación un aroma familiar; el perfume que solía usar  Samir.

Enseguida sobresaltado busque mirar mi ropa para ver si estaba vestido, y si! ...Aún usaba el traje que cargaba en la graduación,  y note en ese momento algunas manchas de sangre tanto en mi camisa como en las almohadas.

Me levanté para verme en el espejo y tenía el ojo morado y una pequeña cura en la parte superior.  Escuche un ruido afuera y decir salí.

El lugar era bastante pequeño o así parecía por las cajas y paquetes por todos lados, había una estantería llena de cosas para carros y un escritorio con una laptop encima. También se veía  un mueble  y una mesa llena de más paquetes.

Me acerqué al escritorio al ver algo que me resultó familiar; un almanaque...

"...él aún conserva el almanaque que le di, pero por que?"—me pregunte intrigado.

Inmediatamente estaba el área de la cocina y allí lo vi; Samir estaba desmoldando un pastel. Èl vestía un pantalón deportivo negro y una franela blanca sin mangas algo gastada.

Se veía tan lindo y sus brazos fuertes tan sexys! "Dios cómo puede ser tan provocador...?"

—Hey, como te sientes?— me pregunto al notar mi presencia.

—Adolorido pero mejor... aquí vives ahora?— pregunté cómo idiota tratando de desviar la mirada de sus brazos, pues era obvio

—Si,— responde sonriendo y agrega,

...disculpa el desorden... es que tengo varias entregas esta semana y aún estoy organizando todo.—

Me sentía extraño,  pero a gusto y seguro! ...y eso me tenía algo nervioso.

—Ven... siéntate, te   prepare  tu pastel  favorito!— me dice mostrándomelo.

Lo recordó!  ...y lo preparo él!  Por alguna razón eso hizo que me emocionara y tomando un pedazo le dije tímidamente mientras probaba el fantástico pastel,

—...gracias! ...y gracias por ayudarme...—

—Martín, que ocurrió?  Por que peleabas con el papá de Daniel? —

Entonces recordé a Daniel! y buscando mi celular pude  ver que tengo como mil llamadas perdidas y muchos mensajes.  Había puesto mi teléfono en silencio durante la ceremonia.

Inmediatamente lo llame y cuando responde me dice alterado,

—Donde estás? Estás bien? Me tenias muy preocupado!—

—Daniel estoy bien... me asaltaron y un amigo me ayudó— respondí ante la mirada de sorpresa de Samir.

—Donde estás?  ...voy saliendo para allá—

—No te preocupes, ya me voy en un taxi a mi casa.  La fiesta, hoy es la  fiesta!  Ve a  la fiesta...— le dije nervioso pues decirle que estaba en el apartamento de Samir no parecía buena idea.

Me costo convencerlo pero lo logre. Ahora debía enfrentar la mirada acusadora de Samir.

—Mmmm... que ocurre Martin? Acaso Daniel y tú?— pregunto con atención Samir.

—Si! ...Daniel es mi novio, y ya  me tengo  que ir— le respondí levantándome del mueble.

—Pero, él no es... Martin por favor!  No te vayas! Te necesito, después de todo este tiempo yo aún...—

Samir se me acercó tanto que podía sentir su respiración. Sus hermosos ojos ámbar brillaban buscando a través de los míos una respuesta a su petición y por un instante sentí que el tiempo no había pasado.

Mi cuerpo deseaba ser poseído por el,  sus labios húmedos se acercaban y entonces de pronto tocaron el timbre, "ring, ring!" con lo que volví a mi centro y me alejé.

Samir con cara de frustración fue abrir la puerta y le dicen con voz seductora,

—Hola galán... vine a darte tu regalo de graduación!!!—

Era un hombre con cabello rosado!!!

—Gix ahora no es un buen momento... — responde Samir tratando de evitar que entrase.

—Por? Tienes a alguien más? ...tranquilo no soy celoso...— dice abriéndose paso y encontrándome  de frente para luego decirme,

—Hola muñeco! No estás nada mal, soy Gix y tú? —

—Soy Martin...—le respondí sorprendido por su descarada familiaridad con Samir.

—Ahh... el famoso Martin!  ...Bueno, Samir debo reconocer que tienes buen gusto— dice viéndome de arriba abajo y continúa,

...y dime Martin, te gusta compartir o prefieres participar?—

—No se preocupen por mi, ya voy saliendo!!!— le respondí incómodo ante aquella estupidez.

"No puedo creer que Samir esté saliendo con un hombre así! esa puta ridícula... que si voy a compartir...?  Una patada por el culo es lo que le voy a compartir..."

Cuando estoy en la puerta, Samir me detiene y me dice,

—No es lo que crees... yo no tengo nada con él...—

—No me tienes que dar explicaciones, anda y sírvele pastel...— le dije ofuscado.

—Estás celoso? Te ves lindo celoso?— me dice Samir sonriendo.

—Ja! Yo celoso? Yo tengo novio y no tendría motivos para estar celoso y menos de ese. Gracias por la ayuda. Adiós.—