cap 24 ⇡

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un día en el pasado / julio 2016

Sábado por la tarde. Chifuyu y Takemichi caminaban por el centro comercial, disfrutando de un delicioso batido de helado.

—Es lindo salir luego de un tiempo. —comentó Hanagaki, dando un sorbo a su bebida.

—Sip. —respondió simplemente Chifuyu.

Takemichi lo observó de reojo, notando que la mirada de su amigo estaba recorriendo todo el lugar, incluso antes de que sus pies llegaran a ellos.

—Oye, Chifuyu... —llamó.— ¿Te encuentras bien?

—Nop. —respondió el mencionado, tan simple como la última vez, sólo que ahora, giró su rostro y sonrió.— Esta no es una salida normal. Necesito tu ayuda, no física, si no moral. Y emotiva.

Takemichi alejó con lentitud la bombilla de su boca y tragó el jugo.

—¿Qué ocurrió? —preguntó.

Chifuyu dejó caer su cuerpo y se balanceó a un pequeño banco en un costado, a lo que el mayor le siguió el paso.

—Yo...  —se detuvo un momento pensando sus palabras.— Voy a proponerle matrimonio a Baji-san. —completó.

Takemichi abrió los ojos en sorpresa y tardó unos segundos en responder.

—¡¿En serio?! —exclamó. Dejó su batido a un costado y abrazó al menor, palmeando su espalda.— ¡Felicidades!

Chifuyu sonrió y susurró un pequeño "gracias".

—¿Cuál es el dilema entonces? —continuó el mayor.— ¿Tienes dudas? ¿No sabes qué responderá?

—No, nada de eso. —lo tranquilizó Matsuno.— Es el anillo. Yo... no estoy seguro de a dónde ir. Consulté en algunos lados, pero...

—Si quieres te llevo a dónde yo los hice. —comentó el rubio.

Chifuyu asintió rapidamente, a lo que Takemichi rió.

—Vamos, no está muy lejos. —dijo, poniéndose de pie.

Caminaron alrededor de todo el centro comercial hasta llegar a una joyería que se notaba, era de gran prestigio.

Chifuyu observó alrededor y notó que, justo en frente, del otro lado de las escaleras, había otra joyería.

"Es la que me recomendó Draken-kun", pensó.

—¿No es de muy mal gusto tener tu joyería justo en frente de otra? —hablaron detrás de ellos, a lo que ambos se giraron con rapidez. Allí, una elegante y bella señora se encontraba parada, con un par de lujosas bolsas en sus manos.— Mhm, no lo creo. Especialmente si es la tienda de mi esposo. —respondió simple.

Chifuyu no supo cómo reaccionar, y se limitó únicamente a reír nerviosamente.

—Buenas tardes, señor Hanagaki. —saludó la mujer.— Ah pasado un tiempo, ¿cómo va la señorita Hinata? —preguntó.

—Muy bien, señora. Gracias por preguntar. —respondió el rubio con una sonrisa.— ¿Y usted? ¿Aún apuesta con su esposo?

La mujer rió levemente.

—Pero por supuesto. —respondió. Sin más, sacó la llave de si bolsillo y abrió el negocio, dejándolos pasar.— Espero que no hayan esperado mucho, tuve que recoger unas cosas. —comentó, yendo directamente hasta el fondo del lugar para dejar sus cosas y luego volver detrás del mostrador.— ¿En qué te puedo ayudar?

—Ah, bueno... —Takemichi se hizo a un lado y dejó el camino libre a su amigo.— En realidad vine a acompañar a un amigo.

La mujer observó al menor y sonrió con sus labios.

Relatos de una familia cualquiera ➪ Drakey/DramiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora