Capítulo XV

82 8 6
                                    

Te quiero, Lía

【 Te quiero, Lía 】

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Caminaron por un buen rato. Solo se detuvieron por unos pocos minutos a comer y descansar. Para después volver al camino.

La noche llegó y todos se detuvieron. Hicieron una fogata.

Thomas jugaba con la mujer llamada Tara. Mientras que Lía los observaba desde lo más alto de un árbol.

—¿Que haces allá arriba?— escuchó la voz de cierto coreano abajo.

—He descubierto que un árbol puede ser más cómodo que el suelo.— la rubia se encogió de hombros.

—Pero no más seguro.— Levantó una ceja .

—Mmm, de hecho...

—Baja antes de que te hagas daño, Lía.— la expresión de la chica cayó en molestia.

—Bien.

Al estar abajo se sentó en el suelo, a un lado de el coreano. Buscó alrededor con la mirada a cierto niño y pudo observarlo correr detrás de Maisie. Lía acostó su cabeza en las piernas de Glenn y su cuerpo en la tierra. El gato llegó y se acostó en las caderas de ella junto a Tommy, que se acosto enfrente de ella y agarró sus brazos, haciéndola abrazarlo.

Glenn pasó su mano por los cabellos que estorbaban en la cara de Ophelia.

—Me alegro de habernos vuelto a encontrar.— una sonrisa apareció por el rostro de ambos.

—Te perdí por segunda vez, pero te volví a encontrar, Lía.— La chica negó.

—Na-ah, yo los encontré.— soltaron una pequeña risa y se hundieron en el silencio, haciendo caer al hombre en un sueño profundo con una de las personas más importantes en su vida con el.

A la mañana siguiente el asiático se despertó y la adrenalina subió por su cuerpo al no sentir ni ver a Lía, Thomas y Maisie con el. Principalmente la preocupación por la primera. Se levantó de golpe del suelo, despertando a Maggie sin querer.

—¿Que pasa, Glenn?— preguntó la mujer al verlo tan alterado caminar por todos lados.

—No están.

Caminó alrededor, buscando alguna señal de ellos. Divisó en el suelo, enfrente de un árbol, el dije de estrella. Llegó hasta el y lo recogió para después sentir algo caer en su cabeza, agarró lo que tenía y pudo ver que era un pedazo de barra nutritiva. Levantó la cabeza y ahí estaban.

Los tres en una rama enorme.

Lia estaba acostada con solo la cabeza recargada en el tronco, viendo su posición un poco torcida del cuello. Tenía una rodilla flexionada y la otra pierna colgaba de la rama, también tapando su cara con la gorra. Thomas estaba acostado boca abajo con los brazos y piernas colgando. Su cara plasmada en el tronco, boca abierta con baba saliendo de esta, mientras agarraba con fuerza una barra nutritiva en su mano izquierda. Mientras que Maisie estaba durmiendo plácidamente acostada en la espalda del niño.

𝐍𝐨 𝐓𝐨𝐝𝐨 𝐄𝐬 𝐏𝐚𝐫𝐚 𝐒𝐢𝐞𝐦𝐩𝐫𝐞- The Walking DeadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora