capitulo 10

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No olvides que lo que alguien es capaz de mucho

- peligroso - volvió a decir Sam mientras caminaba de un lado a otro enojado - pudiste lastimarte, son peligrosos!

- pues ellos no quisieron comerme de un bocado - susurre pero el lo escucho haciendo que se girará para verme a un enojado.

- Ondina no te das cuenta de lo peligroso que es que vayas con ellos a que se alimenten? Además de que nosotros somos los tenemos que evitar que no se descontrolen - explico mientras se sentaba en un sofá.

- ya soy bastante consciente de cual es el peligro y cual no, además si hacen algo tengo recursos para defenderme.

- no vengas con excusas - acotó Jared.

- saben que? Me voy a mi cuarto no puedo creer que ustedes quieran venir a decirme que esta bien y que no.

- aun no hemos terminado, tienes que entender que todo esto es peligroso, tu misma dijiste que esas cosas te habían lastimado y ahora vas por ahí como si nada corriendo con ellos, quien sabe si no es una mentira para alimentarse de ti? - la pregunta de Paul me hizo detenerme enojada el solo escucharlo ya me había hecho enfurecer.

Solo a ellos 3 les había contado todo lo que había vivido esos años en cautiverio, pero aun así intentába poder olvidar todo, intentar ver lo bueno en aquellos que se llamaban diferentes, ahora mismo estaba en duda si esos que confiaba no eran simplemente otra prisión en diferente formato.

- si alguna vez me equivoco lo sabré, mientras tanto no intenten no intenten controlar algo que ya es libre que es peor que un vampiro.

Esas fueron mis últimas palabras antes de subir a mi cuarto enojada para no salir en mucho tiempo.
La verdad estaba demasiado enojada ninguno tenía derecha decirme que hacer y que no, aunque ni lo aparente tenía más de 100 años, era mayor que los mismos ancianos de la tribu, únicamente mi apariencia no había cambiado tanto, lo que parecía dar pie a que todos pensaran que tenían derecho a decidir que debía y no debía hacer.

Por obvias razones en algún momento demostraría mi posición en mi vida, aunque aún no sabía bien cómo, tal vez me iría de la casa de Sam pero no estaba segura, lo único que quería era... ni siquiera lo sabia, ni siquiera sabía como se sentía la libertad porque aún estaba atada a algo, o mejor dicho a alguien.

Recosté mi cuerpo en la cama mientras miraba el techo sin pensar en nada, tal ves eso era lo único que podría alejarme de esta situación, la nada misma, mientras cerraba mis ojos comencé a escuchar el sonido del mar, el como alguien a lo lejos hablaba en susurro mientras más somnolienta me sentía, hasta el punto de caer rendida ante el sueño, olvidando todos los problemas.

Una pequeña niña miraba curiosa el arrecife intentando no espantar a los peses que habitaban ese lugar, la paz parecía mantenerse sin problema hasta que la sangre comenzó a salir de los peces, de un momento a otro vio a delfines tomarlos mientras que sus hermanas se acercaban para recoger sus armas.

Moviendo sus manos expreso su asombro.

- como tienen tan buena puntería? Con Bay aun no podemos atinar al coral - pregunto acercándose a su hermana de casería.

- años de experiencia, debemos volver, no queremos llegar tarde a los cánticos.

- estaré en los cánticos? - pregunto emocionada la niña.

𝕸𝖆𝖗 𝖉𝖊 𝖘𝖊𝖓𝖙𝖎𝖒𝖎𝖊𝖓𝖙𝖔𝖘 ~ Jacob Black  CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora