𝕸𝖆𝖗 𝖉𝖊 𝖘𝖊𝖓𝖙𝖎𝖒𝖎𝖊𝖓𝖙𝖔𝖘 ~ Jacob Black CANCELADA

capítulo 5

Existen pequeños momentos de luz, pero también de sombra y oscuridad, pero hay que conformarse.

- Ondina... ven con nosotras! Podemos estar juntas en otro lugar! No nos dejes! VEN CON NOSOTRAS! ONDINA!

- no quiero! - el grito de Ondina despertando asustada en su cama.

Las pesadillas no eran algo raro, pero desde que había llegado a la reserva se habían hecho más comunes y peores.

Normalmente solo eran voces en su cabeza, otras veces eran recuerdos mezclados con miedos, provocando que despertara asustada.

Sobre todo asustada.

La casa en cuestión ya estaba acostumbrada.

- buenos días.

- buenos días Sam, que hay para desayunar?

- huevos fritos y un poco de pan tostado,  hoy tengo que ir a hacer un par de cosas así que tendrás que comer en la casa de Leah después de la escuela.

- esta bien - le reste importante mientras lo veía preparar algunas cosas.

Sam había pasado mucho tiempo conmigo a partir desde que comencé a vivir en su casa, haciendo también que me contará sobre su imprimación, y como justamente era la prima de Leah, haciendo que sus intentos por conseguir pasar tiempo con ella se vuelvan difíciles.

- deberías comenzar con algo simple como pedirle tomar un café.

- ya lo intente.

- ustedes son complicados.

- lo dice la chica que tiene algo parecido a un llamado extraño hacia un chico que nadie conoce.

- hey lo mio no es extraño, además ustedes se vuelven dependientes de su impronta lo mio es más como una... curiosidad, una que no me deja alejarme sin sentir que destruyen mi corazón.

- la imprimación en cortas palabras - se burlo Sam mientras dejaba la comida en la mesa.

- burlarte todo lo que quieras, pero yo al menos puedo abrazarte a esa persona.

- eso es un golpe muy bajo Ondina - intento regañarme mientras yo solo reía.

Sam se había esforzado en ayudarme a adaptarme a esta nueva vida, además de que era el único puente que tenía con Leah, ya que según el no sentía nada romántico hacia ella ya, pero aun así le daba pena no seguir hablando con la que antes era su persona.

En mi camino a la escuela siempre me gustaba desviarme del camino, era aburrido tener que ir a ese lugar, literalmente no había nada interesante ahí, además de que me aburría muy fácil, no entendía nada, prefería entrar en el agua y pasar ahí mis horas.

- a donde crees que vas? - la voz de alguien  atrás de mi hizo que me detuviera de desviar mi camino.

- estaba... caminando a la escuela, como todos los días, Jacob.

- que bueno, por un momento pensé que estabas intentado escapar de la escuela y irte a quien sabe donde.

- yo? Como crees? - sonreí mientras volvía resignada al sendero en dirección a la escuela.