capítulo 40

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Me hubiera gustado el tiempo se detuviera, pero este con mucho esfuerzo seguía su rumbo natural, por cruel que fuera, tuve que aceptarlo, casi no salía de la casa de los Cullen, los chicos habían hablado con Sam y se negaron a que Jacob siguiera cuidando de mi y que por lo mismo se les permitiera pasar al territorio Cullen únicamente para cuidarme ahí, obviamente no les era muy cómodo pero todo era por mantenerme un poco mejor, aunque era casi imposible.

- ya en serio pero como le hacían para... traer nuevas sirenas? - hizo la pregunta Quil mientras movía una pieza de ajedrez al cual jugábamos.

- en primera no era solo traer sirenas, es una decisión difícil, dependía de ellas abandonar la manada por un tiempo, nuestras reglas son claras, abandonar el océano para reproducirte significa que solo puedes volver después de traer un bebé al mundo.

- y si era niño? O todas eran niñas?

- es complicado... nuestros dones son casi invencibles, la jamás existirá un bebé mujer que no pueda entrar al agua pero los bebés hombres... ellos son diferentes, la magia es muy débil en ellos, por lo que los abandonan ni bien saben su sexo, se les permite volver pero ya no pueden contactar con ellos.

- eso es cruel - exclamo Quil sorprendido.

- así es mi cultura, mi madre dice que estaba asustada al momento de mi nacimiento pero al final todo salio correctamente - sonreí mientras movía mis piezas consiguiendo ganar

- demonios!

Ambos estábamos reacomodando todo para para partida cuando entra Rosalie haciendo entender a Quil que ya podía irse, este se despidió de mi con una sonrisa mientras que con Rose ni siquiera intercambio miradas, al parecer todo el convenio era muy recto en cuanto a llevarse bien se trataba.

- tardaré semanas en sacar este olor de tu cuarto.

- no seas cruel Rose, ellos se han comportado mejor de lo que esperaba, considerando que ellos tienen que venir hasta aquí.

- eso creo, pero será mejor que duermas, mañana madrugaras.

- ustedes se graduadaran yo no, por que debo prepararme yo?

- porque nosotros no dormimos, así que tenemos toda la noche para prepararnos.

- los odio - admiti mientras me recostaba pata conciliar el sueño.

Por mucho que quiera era un poco imposible mi cabeza daba millones de vueltas mientras intentaba encontrar una posición cómoda para dormir, tal  era por la extraña sensación de vacío en mi cuerpo, últimamente sentía que la energía en mi cuerpo se marchaba más rápido, hoy por ejemplo tuve que pedirle a Quil que nos quedemos en mi cuarto haciendo cosas muy tranquilas ya que me cansaba muy rápido al bajar unas simples escaleras, no sabia que le sucedía a mi cuerpo. Estaba intentando cerrar los ojos cuando lo escuché.

Ya ni siquiera puedo dormir.

Que demonios quieres decir con eso Quil? Yo simplemente... diablos se que actúe mal, jamás debí hacer eso pero simplemente fui... ya ni se que decir, me siento idiota, Ondina es la única persona a cual jamás le desearía el mal, con Bella hasta siento que desearía cachetearla para que abriera los ojos pero la sola idea de lastimar a Ondina me duele, y ahora...

Jamás pensé que la imprimación fuera así sabes.

𝕸𝖆𝖗 𝖉𝖊 𝖘𝖊𝖓𝖙𝖎𝖒𝖎𝖊𝖓𝖙𝖔𝖘 ~ Jacob Black  CANCELADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora