Se acercó hacía nosotros como una serpiente que busca intimidar a sus presas. Sus pasos eran largos y decididos, llevaba el uniforme perfectamente planchado y su pelo rubio parecía demasiado rigido para ser natural.
- ¿Así que le estabas enseñando esgrima?- murmuró Bang, mientras se quedaba mirando el sable que todavía sostenía en mis manos- Nose si sentirme mal por ti, por tener que enseñarle a un burro a sostener un palo o sentirme mal por él por tenerte como maestro- masculló mirando directamente al rubio
Felix estaba unos pasos por delante de mí y parecía querer contracar sus palabras.
De todas formas, sino lo hacía él lo iba a hacer yo
- Me sorprende que bajes tu careta tan fácilmente, aunque me caes todavía peor sin ella- le contestó Felix mientras se acercaba a él con los brazos en la espalda- Cuanto tiempo Bangchan ¿verdad? Ahora no eres el brillante y perfecto Christopher que tanto quieres aparentar ser, simplemente este es tu verdadero ser, despreciable y frío con los que en algún momento te mostraron un ápice de afecto.
Los ojos del mayor se quedaron fijos durante varios segundos, como si aquellas palabras se hubieran adentrado en lo más profundo de su ser.
- No soy el único ser despreciable en este jardín y lo sabes perfectamente- le dijo con sus ojos puestos en el rubio
Bang se acercó a Felix y rozó sus labios cerca de su oído, susurandole algo que no logré escuchar debido a la distancia.
Cuándo se apartó su mano viajó hasta la cintura del más joven, acercándolo a su cuerpo. Desde atrás pude obdervar el descontento del rubio, su cuerpo se revolvía intentando huir de su tacto y por lo que parecía Bang se negaba a soltarlo.
- Suficiente, suéltalo- le ordené, quitando su mano del cuerpo de Felix
Bangchan pareció fascinado por mi acción, como si mi mera presencia le resultará cómica he insignificante
- Oh, por lo que veo ahora el príncipe Hwang quiere dárselas de heroe de cuento- su mirada viajo por todo mi cuerpo- Porfavor, vete y déjanos en paz, todavía tengo un par de cosas que hablar con tu amigo
La mirada de Felix cruzó con la mia en aquel instante, talvez no lo conocía a la perfección, pero sus ojos no emanaban emoción alguna y tras unos segundos miro hacía otro lado
No iba a permitir que se quedara ahí
Mi mano envolvió su muñeca y tiré de él hacia mi, sacándolo de la prisión invisible que había construido Bang entorno a él.
- ¿Pero que mierda haces?- se quejó Bangchan, tras haberlo apartado del rubio- ¿Acaso no ves que estabamos hablando?¿No te enseñaron modales en el establo de donde saliste?
Puse a Felix detrás mia y a avancé hacía él, estaba hartó de su presencia, la sangre me hervia de tan solo escucharle.
Algo dentro de mí estaba despertando, algo desconocido e inquitante
- Mantén la boca cerrada y no te acerqués a él- mi mirada se mantuvo fija en la suya- Sería una lastima que todos conocieran tu verdadero ser príncipe Christopher
Una sonrisa y unos ojos que emanaban un fulgor azul, fue lo último que vio Bang antes de que Felix y yo dejáramos el jardín
Mi mano rodeó la muñeca del rubio hasta que estuvimos lejos, he incluso al llegar a la habitación me percaté que todavía lo sostenía con fuerza.
Felix me quitó su mano de un tirón
- ¿¡Porqué te comportas así!? No me digas que creías que necesitaba un brillante caballero de armadura plateada para que me salvará de él- se sentó en su cama y escondió su cabeza entre sus manos- Hyunjin escúchame...- levantó la cabeza y me miró directamente a los ojos- No soy ni seré nunca una princesa a la que tienes que salvar, ambos somos hombres y en éste mundo un hombre no debe de ser protegido por otro, esta mal y deberías de saberlo
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The Crystal Prince°• {Hyunlix}
FanfictionEl reino de Azdhara es conocido como el lugar donde todos viven "felices para siempre". Debido a un manuscrito real, todo principe o joven de la realeza debe de formarse en la academia real de Azdhara. En ella se les ensaña las labores necesarias pa...