The Crystal Prince°• {Hyunlix}

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Cuándo entre por la puerta de mi habitación me sorprendió ver a Felix ya levantado, tenía el pelo mojado mientras se estaba atando los zapatos.

- Has vuelto bastante pronto- mencionó al aire sin levantar la cabeza

Él parecía listo para enfrentar el final de una novela épica, salvar una princesa y talvez tener un felices para siempre, en cambio yo me veía deplorable, hacía un par de días que no me bañaba por estar en cama, mi ropa estaba arrugada y mi pelo necesitaba que lo lavara.

- Creo que voy a tomar un baño, antes de irnos- dejé mis zapatos en la entrada y avance por la habitación

- ¿Quieres que te ayude?- comentó en tono de burla el rubio, yo negué y él se hecho a reír- Deja de estar tenso, hoy será un gran día

- ¿Lo dices por la charla por tu madre?- me apoyé en el marco de la puerta

Felix sonrió y se levantó de la cama

- Ella nos dará lo que buscamos, confía en mi- su sonrisa me hizo sentir cálido, así que por primera vez decidí dejar mi estrés a un lado

Me duché bastante rápido y antes de que cualquier alumno estuviera despierto, nosotros ya estábamos fuera. El camino hacía el despacho de la directora Lee fue un tanto complicado, no porque hubiese ningún obstáculos entre nosotros y aquel lugar, sino que Felix me comentó que el despacho cambiaba de lugar cada tres días, para mayor seguridad, así que fue un tanto complicado dar con él.

Primero revisamos toda la planta de profesores y no encontramos nada, luego bajamos a la planta de aulas comunes y tampoco hubo nada que llamará nuestra atención, aparte de aulas vacías, no fue hasta que descendimos a la planta de cocina y mantenimiento que dimos con la puerta correcta.

Durante el trayecto, Felix me describió la puerta del despacho como la más simple y vieja de todas, me explicó que estaba hecha de madera oscura y contaba con siglos de antigüedad.

- Hemos llegado- anunció el rubio a mi lado, cuándo ambos estuvimos enfrente de la puerta

Dudo que a aquello se le pudiera considerar puerta, era un trozo de madera mal cortado, con astillas por todos lados, no tenía picaporte ni un timbre al que tocar, solo una pequeña inscripción en lo alto con la frase: "Llama al alba, aunque el ocaso puede ponerse celoso al no ser llamado"

- ¿Es por esto que teníamos que venir pronto?

- Asi es, se nota que piensas rápido

Sinceramente, no entendí muy bien su respuesta

Felix acercó su puño a la madera y tocó una pequeña canción con sus golpes, no sabía que era aquella canción, pero supuse que era un código especial, porque unos segundos más tarde habló una voz al otro lado de la puerta.

- Sea bienvenido de nuevo joven Lee, su madre lleva unos minutos esperando su visita- contestó una voz rasposa y gruesa

- Gracias puerta ¿nos permitirías pasar?

Felix se giró hacía mí ¿acaso me estaba presentando ante una puerta?

- ¿Quién es el jóven a su lado?

- Príncipe Hwang Hyunjin de la comarca de Garnet, viene conmigo, no te preocupes- le dijo, como si ambos fueran cercanos- Lo tendré vigilado, no pasará nada

La puerta hizo un extraño ruido, como si la madera estuviera crujiendo en el interior de la tabla ¿talvez estaba pensando su decisión?

- De acuerdo, podéis pasar- accedió la voz- Príncipe Hwang, espero no tener que arrepentirme de dejarle entrar