ALMAS GEMELAS || Pedri González

Capítulo 11

Diez minutos después de confesarle a Sira mi historia con Alex, aterrizamos en un aeropuerto de París. Una vez que se lo conté me sentí como más liberada y feliz de saber que podía confiar en alguien y contarle todos mis problemas, y sabía que no solo a ella, sino a cualquier persona del equipo, tanto en Pedri y Gavi, como con todos los demás, sobre todo en Ferran, Ansu, Araújo, Balde, Pablo Torre, Lewandowski, Frenkie, Eric... y también en todos los otros si en algún momento necesito algo.

Cuando bajamos del avión y salimos del aeropuerto, nos tuvimos que montar en un autobús (no si antes estirar un poco las piernas) y nos pusimos rumbo al hotel en el que íbamos a estar estos tres días.

El hotel era increíble, para entrar tenías que atravesar un gran jardín con el césped recién cortado, con un tono de verde súper llamativo, en el que había algún que otro pato paseándose sin acercarse a nosotros.

Una vez atravesamos el gran jardín mis vistas de figaron en el espacio que había entre la entrada del hotel y el jardín, que lo ocupaba una enorme fuente preciosa y muy elegante que echaba chorros de agua sin mucha presión, sin salpicar nada, eso me gustó.

Y ya dentro del hotel, digamos que me quedé un poco más impresionada. Nada más entrar estaba la recepción en una esquina justo al lado de la entrada, en la estaba una chica muy guapa preparando las llaves de las habitaciones para entregárnoslas cuanto antes. Y al otro lado habían unos sofás de tres plazas para sentarte si tienes que esperar. Allí fue justo donde nos reunió Xavi para explicarnos el tema de las habitaciones.

- A ver chicos, las habitaciones podrán ser solas o en parejas. Para organizarme un poco los que tienen mujer compartirán habitación con sus parejas, incluyendo a Ferran y Sira. -dijo Xavi alegre, aunque para mí no lo tanto porque ahora me tocaría dormir en una habitación que seguramente será más grande que toda mi casa- Los demás, que sois... Pedri, Gavi, Eric, Koundé, Kessie, Ansu, Araújo,  Raphinha, Balde, Pablo Torre e India, -nos dijo mirándonos a nosotros- tenéis diez minutos para organizaros y, como sois impares, el hotel podría hacer una excepción en una de las habitaciones y prepararla para tres personas. -nos dijo con una sonrisa en la boca y mirándome a mí, sobre todo a mí porque sabe que voy a tener que compartir habitación con dos chicos.

-Bueno, ¿cómo nos ponemos? -preguntó Eric.

-Podemos hacer nosotros las parejas y que India decida con cuál de todas decide compartir habitación -propuso Araújo mirándome como si me pidiera permiso o me pareciera bien la idea.

- A mí me parece bien -respondí quitándole importancia al asunto. En verdad me daba igual con quienes compartir habitación porque, como ya he dicho antes, confío en todos y me caen muy bien. 

-Vale, pues vamos a hacer las parejas, que quiero irme ya a la habitación -dijo Gavi con un tono cansado, la verdad es que sí parecía que tenía ganas de descansar un poco, y además se le notaba en la cara.

--------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Al final como estaban todos cansados decidieron que las parejas fueran las mismas que habían tenido en el avión, y por petición de ellos y sus caras de súplica me decanté por compartir habitación con Gavi y Pedri, cosa que les alegró muchísimo porque casi se ponen  a lanzarme por los aires en medio de la recepción del hotel.

Lo primero que vi cuando abrí la puerta de la habitación, que era la habitación 186, fueron dos camas. Exacto. DOS CAMAS. Y éramos tres personas. Lo bueno, era que una de la camas era de matrimonio y era gigante, por lo que me tranquilicé un poquito, solo un poco porque no sabía con cuál de los dos iba a dormir, o si no dormía con ninguno, pero bueno, ahora no me iba a calentar la cabeza ahora, por lo que fui al salón (que estaba delante de las camas) y me tiré en plancha al sofá, porque tenía una pinta muy parecida a la Gavi, solo que yo añadiendo las ojeras por no haber dormido nada pensando en este viaje durante casi toda la noche. Y me quedé durmiendo prácticamente al instante.