Capítulo 15

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-Gavi quiero hablar sobre lo que pasó esta mañana -le dije intentando no perder la paciencia. Llevaba insistiendo por lo menos veinte minutos y no quería hablar conmigo.

-No vamos a hablar de eso porque no pasó nada esta mañana -me dijo casi a punto de gritarme- Esta mañana no nos hemos visto, ni hemos hablado ni hecho nada, ¿me has oído? -me preguntó eso como si quisiera que se lo prometiera y fuera lo que ha dicho verdad.

-Vale, pues entonces vamos a hablar de todo lo que habéis hablado Balde y tú sobre nuestro "no encuentro" -se que se le estaba acabando la paciencia, pero me merecía saber por lo menos que habían hablado y ver si yo estaba de acuerdo.

-Esta bien, si quieres hablar, vamos a hablar -me empezó a decir con la voz más calmada- Se que esto no debería decírtelo yo, pero como eres tan cansina y tan pesada te voy a explicar las cosas- me dijo pensando en lo siguiente que me iba a decir- Las cosas son así, le gustas mucho, pero que muchísimo a Pedri, y yo no voy a estropear vuestra futura relación solo porque sienta algo hacia a ti, porque lo que siento no se puede comparar con lo que siente él, tú a mi me gustas, pero él esta enamorado de ti y sé que tú también de él porque me ha contado lo que habéis hecho esta tarde. Así que esta mañana no ha pasado nada y si quieres podemos seguir siendo amigos. -Eso me lo dijo último me lo dijo un poco más desilusionado.

Yo no me lo podía creer, ¡le gustaba a Gavi y Pedri estaba enamorado de mí!, después de todo lo que me había dicho me quedé en una especie de shock en el que solamente le podía mirar a los ojos, no podía decirle nada, así que lo único que pude hacer fue darle un abrazo.

-Lo siento mucho Gavi -fue lo único que me salió por la boca mientras el respondía a mi abrazo.

-Da igual, yo lo único que quiero es que mis mejores amigos sean felices, y sé que así lo van a ser. -me dijo después de separarse del abrazo.

Yo le sonreí y un segundo después llamaron a la puerta. Me levanté de la cama cuando abrí la puerta de la habitación me encontré con Sira.

-Tía, ¿qué hacéis?, que vais ya diez minutos tarde a la cena. -me dijo Sira curiosa mientras asomaba la cabeza por la puerta para cotillear.

-Ostras, perdón, ya vamos -le respondí a ella tras mirar la hora en mi reloj de muñeca.

-Venga rápido, os espero allí -nos dijo a los dos antes de cerrar ella la puerta porque yo estaba buscando mis zapatos para bajar.

Cuando entramos en la comedor para cenar, todos nos miraron esperando a que dijéramos por qué habíamos llegado tarde, pero nosotros nos sentamos en nuestros respectivos asientos y no abrimos la boca: yo porque no me salían las palabras de la boca ya que todavía estaba en shock, y Gavi porque seguramente estaría asimilando lo que me había dicho minutos atrás.

Como no dijimos nada, algunos empezaron a romper el silencio incómodo y en cuestión de minutos todos se olvidaron de lo sucedido con nosotros, bueno, todos menos Pedri, que estaba sentado al lado de mí y no hacía otra cosa que mirar su plato y remover con la comida con su tenedor. Se había enfadado por haber estado Gavi antes de la cena y encima llegar tarde después de haber estado toda la tarde juntos y habernos dado nuestro primer beso, estaba segura, después en la habitación tendremos que hablar y explicarle lo sucedido, porque yo no estaba dispuesta a mentirle a Pedri y ocultarle cosas que pueda afectar a nuestra relación, que ahora mismo no sé qué somos, pero eso da igual.

Con el móvil debajo de la mesa le envié un mensaje a Gavi diciéndole que se lo teníamos que decir todo a Pedri, a lo que él me respondió que no, que le íbamos a decir que estábamos hablando sobre lo que habíamos hecho Pedri y yo esta tarde y así no se enfadaría. No quería, pero pensándolo bien no habíamos llegado a hacer nada y si Gavi no iba a intentar nada conmigo, no iba a dejar que se dejasen de hablar los dos por una tontería, así que no me quedó más remedio que aceptar su propuesta.

ALMAS GEMELAS || Pedri GonzálezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora