Capitulo 2

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Fecha: 26 de Noviembre, 1609

Ahmed tomó la mano de su favorita Beyhan y la beso delicadamente, estaba fascinado con ella, y no le dejaría ir tan fácil.

─Mi amado Sultan, debo retirarme, ya ha pasado mucho tiempo.─trató de safarse pero el Sultan Ahmed fue más fuerte

─Desde ahora, haré que todos sepan que eres mi favorita.─besó sus labios con suavidad, se daba el tiempo de saborearlo.─Te veré está noche.

─Con su permiso, mi Sultan ─realizó una reverencia y se dió la vuelta para irse

Una sonrisa llena de victoria invadió su rostro al salir de la morada del Sultan, había logrado lo que más quería desde que había llegado al Palacio, cuando vio el poder y libertad que poseía quienes eran las mujeres del Sultan, quería tener eso también. Beyhan no era cualquier mujer, ella tenía ambición, algo que lograba ocultar por su faceta de inocencia y alegría.

Vaya fue su sorpresa al encontrarse con la Consorte más amada del Sultan, bueno, al menos por ahora, ya que Beyhan entrando al campo de batalla, se convertirá en rival para todos, en especial para la mujer de cabellos negros.

─Mi Sultana.

─Supe que visitaste los aposentos de su majestad, a decir verdad, tienes demasiada suerte de haber podido entrar.─la miró con superioridad

─Así es, tuve suerte, y lo voy a usar a mi favor. Su majestad me nombró Beyhan, dijo que se encargará de hacer saber que todos sepan que soy su favorita.─entrelazó sus manos sobre su vientre

─Le di cuatro hijos, y estoy cuidando a una niña que me ama como si fuera su madre, ¿que más pruebas de amor quieres?

─No importa cuántos hijos le de a el Sultan. Si sus hijos fueran la fuente del amor, el la amaría infinitamente. Pero es claro que no es así.─dijo tomando una bocanada de aire.─Con su permiso, Sultana Kösem.

Caminó por los pasillos, accidentalmente, un pequeño niño chocó con ella.

─Lo lamento mucho ─el niño tenía los ojos llorosos

─¿Por qué lloras? ─se arrodilló y observo si se había lastimado

─¡Şehzade! ¡Şehzade! ─un hombre alto y bastante apuesto llamó por el niño.─¿Por qué corrió?

─Quiero ver a mi hermano, Iskender.─dijo tomando la mano de la Hatun

─No puede verlo en este momento, está descansando.─miró a la joven.─¿Quien eres tú?

─Soy Beyhan, la nueva favorita de su majestad ─dijo

─Bien.─asintio y luego se llevó al joven príncipe

El niño giró su cabeza y le sonrió a la Hatun.

Beyhan soltó un suspiro y siguió su camino al Harem, dónde Lalezar Khalfa, una mujer que alguna vez sirvió a la difunta Valide Handan Sultan.

─Trae tus cosas, te llevaré a tus nuevos aposentos en el balcón de las favoritas.

─¿Tendré aposentos para mí? ─sonrió alegre

─Sí, pues hace mucho que nadie va a los aposentos del Sultan.─caminó por unas escaleras y Beyhan recogió un poco su vestido y la siguió tratando de seguir su paso

[...]

Desde que se había convertido en Favorita, había conseguido varias personas que estaban dispuestas a serle leal.

─Beyhan Hatun.─Aysel, la criada más leal de Kösem se acercó a ella.─¿Puedo hablar con usted?

─La señorita Beyhan está desayunando, Aysel.─su criada Beyza habló

─Te escucho.─se acomodó entre su cojín

─Traeré más jugo ─Beyza se puso de pie y salió del Harem

Aysel tomó una bocanada de aire, y luego se rindió ante ella.

─Hace mucho que no recibo mi paga, recibo malos tratos de parte de la Sultana Kösem, por favor, ten compasión, déjame servirte.─se arrodilló

Beyhan frunció el ceño y suspiro, mirando a Aysel, como si pudiera ver a través de ella, ver sus intenciones.

─Le sirves a la Sultana Kösem desde hace varios años, cuidas de sus hijos, le fuiste leal hasta hoy, ¿cuál es la razón de ese cambio? ─alzó una ceja.─¿Que pretendes?

─Yo no pretendo nada.─negó de inmediato

La favorita se puso de pie y miró fijamente a Aysel, quién estaba con los ojos llorosos.

─Ve, y dile a Kösem, que me aseguraré de llegar lejos, tendré un hijo pronto la desplazaré.─murmuró.─No soy tonta, Aysel.... Largo, ni siquiera puedo verte a la cara.

Sin protestar, Aysel se retiró.

Beyza volvió con un vaso de jugo de mora, se lo dió y se sentó a su lado, observándola.

─¿De que hablaron? ─preguntó

─Me suplicó que quería ser mi criada, pero no soy tonta, Beyza. Era demasiado extraño que de repente me había pedido esto. Pero no soy tonta, no caeré en las trampas de la Sultana Kösem.

𝐏𝐀𝐑𝐀𝐃𝐈𝐒𝐄 | 𝑨𝒉𝒎𝒆𝒅 𝑰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora