𝐏𝐀𝐑𝐀𝐃𝐈𝐒𝐄 | 𝑨𝒉𝒎𝒆𝒅 𝑰

Capitulo 26

Esa misma noche, Beyhan paseaba por el jardín del Palacio de Mihrimah, su mente se encontraba invadida de recuerdos de cuando ella daba a luz.

─Sultana madre.─una voz hizo que sus pasos se detuvieran

─¿Abide? ─Beyhan se volteó para mirarla, sus ojos se encontraron con la gran belleza que caracterizaba a las hijas del Sultan Ahmed

─Sí, mi Sultana, soy Abide.─la joven mujer se acercó a pasos lentos y a la vez llenos de firmeza

─Pensé que te habías alejado de la realeza al lado de tu madre.

─Mi madre murió.

─Que Allah la reciba en su paraíso.─a lo dicho, Abide asintio, reconociendo las condolencias de la Valide

─Y regresé ya que mi deseo es casarme con algún Paşha, al igual que Mihrimah.

─La Sultana Mihrimah se casó enteramente por amor, y como te habrás enterado, ya tienen dos hijas, mis nietas.

─El casarme me proporcionará el dinero que necesito, y el cariño de un hombre.

─Obtendrás el dinero, pero duramente el cariño de un hombre.

─Lo tendré todo si eso deseo ─Abide sonrió, casi parecía hacerlo con malicia.─Eso aprendí de usted.

─Si un esposo quieres, un esposo tendrás.

─Sabía que podía confiar en la madre del Sultan.

[***]

1de Octubre, año 1635

Altan Paşha se convirtió en un gran confidente de Orhan, incluso su amigo.

Orhan, aún asombrado por el nacimiento de su sexta hija con Aynur, decidió dejar que el Paşha tomara algunas decisiones importantes para el Estado.

─Madre.

─Sultana.

Ambos aparecieron en los aposentos de Beyhan, quien no se reverenció, ya que estaba muy concentrada en su bordado.

─Venimos a pedirte algo.─Orhan se acercó y se sentó al lado de su madre

─¿Que deseas, hijo? ─finalmente, Beyhan alzó la mirada

─Tu bendición para el matrimonio que organice entre Altan y Abide.

─Tienes mi bendición.

─Gracias, madre.─el Padişah se puso de pie y agachó la cabeza para después irse

Altan se quedó, parecía embobado por la apariencia de la Sultana.

─¿Y usted qué desea, Paşha?

─Su aceptación.

─El casarse con una Sultana de sangre es un honor que pocos llegan a tener. Así que me parece que tú deberías estar agradecido de que haya aceptado.

─¿Por qué dices usted que yo no estaría agradecido?

─Su rostro contradice sus palabras.

Lentamente, un color rojizo llegó al rostro del Paşha, estaba sonrojado, no sabía que decir, mejor dicho, había tantas cosas que decir pero sabía que todo estaba prohibido.

─Puede retirarse.─Beyhan se puso erguida y lo miró

[***]

29 de Octubre, año 1635

Las semanas transcurrieron entre cartas, Beyhan solía escribirle a Altan sobre la prohibido que todo se ha vuelto entre ambos, y Altan respondía con que lo prohibido atraía más.

─Nos volvemos a ver, mi Sultana.─Altan la llamó, llegando de detrás de ella

─Lo mismo digo.

[***]

En Kütahya, Ibrahim residía con su amada Hülya y sus tres hijos. Lamentablemente, el joven príncipe cayó enfermo, esto fue la preocupación de todo el Imperio Otomano.

─Mi Ibrahim, que Allah lo guíe al paraíso.─Beyhan oró, lo que repetía cada día

─¿Papá va a estar bien, abuela? ─la pequeña Melek pregunto, jalando el vestido de la Sultana

─Eso espero, mi cielo.─Beyhan se inclinó y besó la frente de su nieta.─Y tú estarás siempre con tu madre, apoyándola, de manera tan firme como el hierro.