Capitulo 25

146 17 0
                                    

1 de Noviembre, año 1634

A sus cuarenta años, Valide Beyhan conservaba la gracia y belleza que la habían caracterizado, junto con la agudeza que la hacía temida y respetada.

Se encontraba en el palacio de su hija, la Sultana Mihrimah, compartiendo una cena en compañía de su yerno, el estimado Levent Paşa.

─Valide Sultana, esposa amada, me complace presentarles a un miembro de mi familia, mi hermano mayor, Altan Paşa ─anunció Levent con reverencia.

Las puertas del salón se abrieron, permitiendo la entrada de un hombre alto, de cabellos negros y porte imponente.

Beyhan observó con detenimiento al recién llegado. Su figura era gallarda, y su semblante le resultaba familiar.

Con una leve sonrisa, reconoció la cortesía del hombre cuando se inclinó respetuosamente ante ella y Mihrimah.

─La más hermosa de las Sultanas ─dijo Altan, dirigiéndose a Beyhan, quien sintió un dejo de satisfacción al devolverle la sonrisa

─Creo haberle visto antes, Paşa ─comentó Beyhan, sus ojos escrutando al hombre con astucia─. ¿Acaso no fue usted gobernador de Manisa antes que mi hijo Orhan?

─Así es, Valide Sultana ─admitió Altan con humildad─. Es un honor que me recuerdes.

─Nunca olvido a mis aliados... ni a mis enemigos ─replicó Beyhan mientras tomaba asiento en la cabecera de la mesa, reafirmando sin palabras su autoridad.

Los demás se acomodaron en sus lugares. Mihrimah, con un gesto casi tímido, tomó una copa de jugo, mientras los demás alzaban sus copas de vino.

Con una sonrisa radiante, llamó la atención de todos.

─Tengo una noticia ─anunció Mihrimah, su voz cargada de alegría

─Dinos, hija mía ─dijo Beyhan, sus ojos fijos en los de su hija

─Estoy embarazada ─declaró finalmente Mihrimah.

Beyhan sonrió, su felicidad evidente.

─Es una bendición, Mihrimah. Me llena de felicidad oír tan noticia ─respondió Beyhan, su voz cargada de afecto.






[***]

Los días pasaron, la mente de la Sultana Beyhan vagaba constantemente hacia el hermano de Levent Paşha, Altan.

La joven Hümaşah no pasó por desapercibido la distracción de su madrastra, así que, decidió hablar de aquel tema.

─Madre.─Hümaşah se acercó y hizo una reverencia.─¿Puedo hablar con usted?

─Por supuesto.─Beyhan reaccionó rápidamente y puso sus ojos en Hüma

Ambas se sentaron en el diván, la mayor puso sus manos entrelazadas sobre su regazo elegantemente, Hümaşah la imitó.

─¿De que deseas hablar? ─preguntó la Valide

─Sobre su distracción, mi Sultana.

─¿Distracción? ¿A qué te refieres?

─Siempre estás parada junto a la ventana, pensando en algo, o alguien.

─¿En quien podría pensar?

─Supe que usted estuvo con Mihrimah en su Palacio, y Levent Paşha les presentó a ambas a Altan Paşha.

─Ese hombre no es de mi interés, mi corazón le pertenece a tu padre.

─Cada mujer tiene la oportunidad de enamorarse de nuevo.─Hümaşah dijo

─Yo no soy una mujer libre, soy la madre del Sultan.─Beyhan recordó, para luego tomar la mano de Hümaşah.─Y también soy la mujer más poderosa del Imperio Otomano.

─Con ese poder, podría hacer lo que a usted le plazca.

─Ojalá fuera así de fácil.









[***]

29 de Marzo, año 1635

El Imperio Otomano celebraba el nacimiento de un hijo más del Sultan Orhan.

Una hermosa niña llegó al mundo, la forma de su rostro poseía la mismísima esencia de Beyhan, y sus cabellos eran dorados al igual que el de Aynur.

─Es preciosa ─murmuró Beyhan, acariciando la regordeta mejilla.─Será una gran Sultana.

Orhan se acercó, orgulloso de que su madre le haya dado cumplidos a sus hijos e hijas en cada nacimiento.

─Tu bendición es mi gran deseo, madre.─el Padişah dijo, tomando a su hija de los brazos de su abuela

─Sabes que todas mi bendiciones caen sobre ti y todos tus hermanos.

─Madre, quiero pedirte algo.

─Dime.

─Quiero que nombres a mi hija.─Orhan la miró, como si le estuviera rogando

─Es un gran honor el que me otorgas─Beyhan sonrió felizmente, sus ojos se colocaron sobre el rostro de su nieta.─Su nombre será Hürrem, porque no olvidaremos nuestro pasado.

Aynur observaba alegre, a pesar de que ya tenía tres niñas, todos celebraban cada nacimiento como si fuera el primero.

Azize por otro lado, sostenía de la mano a Beyhan, y de la otra mano se agarraba el pequeño Osman.












[***]


19 de Agosto, año 1635

Otro nacimiento llegó meses después, Mihrimah dió a luz a otra niña igual de bella que su madre, eso, según palabras de Levent.

─Tengo otra preciosa sobrina.─Orhan besó con ternura la frente de su hermana

─¿Cómo la nombrará, majestad? ─Levent preguntó, emocionado

─Reyhan, Sultana Reyhan.

𝐏𝐀𝐑𝐀𝐃𝐈𝐒𝐄 | 𝑨𝒉𝒎𝒆𝒅 𝑰Donde viven las historias. Descúbrelo ahora