en los frondosos bosques de Pandora, el primogénito de el olo'leyktan de los omaikaya, Nateyam, una noche antes de su partida hacia un mundo oculto en el que se refugiaban proximamente, soñó con cierto chico corpulento de piel aguamarina de ojos gri...
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El joven omaticaya al llegar a su residencia quedó fascinado por el gran mauri en el que se habían instalado, al momento de elegir habitaciones, al ser el mayor le permitieron escoger primero, decidiendose así por una habitación apartada de las demás, esta siendo la segunda más grande, recibiendo una mirada de guerra de todos sus hermanos, hasta de la pequeña tuk, sin tomar le mucha importancia tomó sus pertenencias y se dispuso a ir a su cuarto a organizarlas, y que al entrar notar que aquí las cámas al parecer eran muy diferentes a las de su hogar siendo estas camas terrestres grandes y ondas, teniendo una forma de carriola de bebe, teniendo en la parte techada una pequeña estantería en la cual procedería a poner su "libreta" de dibujos, y acomodando el resto de su habitación a su gusto, rodó la cama del centro a una esquina de la habitación debajo de una tela trasparentisa que hacia de ventana, en el medio colocando un tapete característico de su clan, el otro lado algunas canastas con algunas de sus ropas, un estandarte donde colgaría su arco próximamente, ahora si rebuscando entre sus cosas una cajita pequeña, ovalada con base rectangular, decorada con oro y lápiz lazuli, en la cual guardaba cosas personales, su familia sabía de la existencia de esta cajita, puesto a que tuk siendo 1 año más pequeña de lo que es ahora había pensado que era uno de los recipientes en los que Neteyam guarda sus dulces preferidos, estando por abrirla frente a toda su familia para así "compartir los bocadillos" pero de no ser por que Neteyam justo entro por la puerta de su cabaña, arrebatandole con algo de brusquedad el cofre a tuk afirmando que no eran dulces y llevándola devuelta a su habitación, así evitando que su familia descubrieran siertas cosas vergonzosas sobre el por medio de las cosas que guardaba en ella, y aunque prefería no tener secretos con su familia, esta vez iba a ser egoísta y mantener esas cosas personales para si mismo.
Devuelta a la realidad, pone la caja en la estantería de la cama, ahora tomando la libreta y un lápiz de carboncillo, yendo a la que sería la sala principal del mauri, así sentándose en una de las esquinas más apartadas de la casa a seguir dibujando al chico que había aparecido en sus sueños y ahora vio apenas tocar la arena.
Mientras lo dibujaba no pudo evitar soltar una risa mientras en sus mejillas dominaba un tono carmín gracias al dibujo que había echo, su hermano menor que pasaba por hay se le quedó viendo extrañado mientras el seguía perdido en los detalles de los ojos que estaba haciendo.
- hey bro, que te hace sonreír así de bobo- preguntó burlon acercándose para arribar la libreta de manos de Neteyam, cosa que este último no iba a permitir, por lo que la pego a su pecho y le mostró sus colmillos a su hermano- wow tranquilo thanator salvaje.
-LARGATE LO'AK, no te importa lo que hago- dijo irritado por el apodo
-sisi, se nota que una de las na'vi del pueblo te trae loquito~ y solo llevamos unas horas aquí! Irónico no?
-TT, me voy a mi habitación, apestoso.
Dijo Neteyam con recelo levantándose de su lugar y yendo a su parte del mauri a encerrarse
- eres raro, Neteyam.
Fue la última frase que se dirigieron los dos hermanos en ese día caluroso.
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