Capítulo 2: Necesitaba tanto esto

630 32 4
                                    

Seis años más tarde.

POV T/N

-Amor, despierta, te necesito-Dice mi esposa acariciando con las yemas de sus dedos mi estómago y acomodándose encima de mí.

Yo me voy despertando poco a poco mientras sentía a mi esposa darme besos por todo mi rostro.

-¿Alguien tiene ganas de sexo mañanero?-Digo con una sonrisa pícara.

-Primero quiero decirte algo-Dice con una gran sonrisa.

-¿Qué pasa cariño?-Digo mirando para esos ojos verdes.

-Hoy es el cumple de Sarah y ya reservé en el club de hípica para celebrar su cumple allí-Dice acariciando mi rostro con las yemas de sus dedos.

-¿Otra vez a pasar un calor horroroso con los caballos?, ¿ella no se da cuenta que su cumple es en pleno verano y los animales lo pasan mal?-Digo sentándome en la cama y ayudando a Wanda para que esté más cómoda encima de mis piernas.

-Lo sé cariño, pero es lo que a ella más le gusta, aparte que ese club es el mejor del país, cuidan demasiado bien a los animales-Dice apoyando su frente en la mía.

-Si, tienes razón, hoy nos espera un largo día, Sarah se pone realmente ansiosa cuando se trata de caballos-Digo suspirando.

🔞‼️

De repente ella se acerca y me besa suavemente empezando a mover sus caderas en círculos sobre mi entrepierna.

-Será mejor que nos aliviemos las tensiones cariño, tengo tantas ganas de tí, llevamos tanto tiempo sin hacerlo que no sé si podré resistirme más-Dice con sus labios rozando los míos.

-Yo siempre tengo ganas de tí-Digo con mis manos en su cintura.

Y cuando menos lo esperaba, se quitó su camisa ancha, permitiendo verla desnuda enseguida.

Se quita de encima de mí para ponerse al lado y me quita la sábana que me arropaba.

-Te deseo tanto T/N-Dice mientras acariciaba lentamente el bulto de mi entrepierna que crecía cada vez que me tocaba.

-Y yo a tí mi amor-Digo como puedo por la sensación de su masaje en mi pene.

Ella se acerca dejando besos y chupando mi cuello sin dejar de trabajar en mi entrepierna.

-Quítate los pantalones-Ordena ella, apartándose un momento de mi cuello y levantando su mano.

Hice lo que me dijo, me quité los pantalones y los bóxers, también quitando mi camisa y sostén, dejándolos en alguna parte de la habitación.

-Tantos años juntas y sigo teniéndote como el primer día-Dice con una mano en la base de mi pene y relamiéndose los labios al final de sus palabras.

Yo solo conseguí soltar un gemido bajo mientras ella bajaba la cabeza hacia mi entrepierna, al principio besaba y lamía la punta pero después fue yendo a un ritmo lento metiendo mi pene cada vez más al fondo de su garganta.

-Sigue así, lo estás haciendo muy bien-Digo entre gemidos no muy altos para que no escucharan afuera.

Ella gemía por la sensación y hacía que mi orgasmo llegara cada vez más rápido.

-Estoy tan cerca tan rápido, tienes un efecto tan grande en mí-Digo entre gemidos bajos notando mi orgasmo ya presente.

Siguió con su trabajo en mi entrepierna sin parar hasta que finalmente, se sacó el pene de la boca y lo masajeaba lentamente mientras me corría en su boca, ella lo tragó todo.

Un nuevo comienzo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora