GIZA, ANTIGUO EGIPTO – 2505 aC
— LAURENEBTI
( . . . )
Por un momento todo lo que se pudo escuchar fue el grito de los hombres del rey y sus murmullos sobresaltados. Hasta que uno de los soldados gritó por encima del estruendo:
—¡Lo encontré, señor!
El rey Menkaure descendió inmediatamente del carro, enfurecido, justo cuando la gente cedió y aparecieron dos soldados tirando de alguien. Arrojaron a la mujer al suelo frente al rey. Cuando levantó la cabeza, Laurenebti sintió que su cuerpo se helaba. No...
—La tenía.— Uno de los soldados levantó la bolsa de tela que sostenía.
—Karlah ...— Susurró la princesa para sí misma.
—¿Por qué robaste las monedas? ¿Crees que puedes salirte con la tuya de semejante crimen? ¿Crees que te mereces más que estas personas aquí? —El rey rugió, acercándose a ella.
— Yo no lo robé, señor... — Su voz temblaba por el miedo. —Es un error, juro que no robé nada, yo...
—¡Estuve contigo, no mientas!
Laurenebti estaba paralizada por el miedo, sin entender lo que acababa de suceder. Cuando el rey gritó, ella salió de ese trance y sin pensar en las consecuencias, se bajó del carro y se acercó, decidida a tratar de sortear esa situación de la mejor manera posible.
—Padre. —Dijo, con firmeza, atrayendo la mirada del rey. —Debe haber un malentendido aquí.
Su mirada alternaba entre el rey y Karlāh, quien parecía un poco asustada. Tenía miedo de que la princesa dijera algo que pudiera revelar lo que tenían, no quería que ella sufriera las consecuencias de eso. Pero igualmente, Laurenebti tampoco quería que ella sufriera las consecuencias de ese malentendido. Estaba segura de que Karlāh no tenía por qué hacer eso, lo sabía muy bien, nunca le robaría dinero a nadie.
—Aquí no hay malentendidos. No te metas en este asunto, Laurenebti—, respondió el rey con brusquedad.
—Claramente no estás pensando con claridad. ¿De verdad crees que robó algo? Mírala bien. ¿Por qué esta chica haría esto? —Laurenebti insistió, ignorando su estupidez.
—¿Por qué no lo harías? —Él la enfrentó. —Hablas como si la conocieras muy bien. ¿Por qué defiendes a esta ladrona?
Laurenebti vaciló rápidamente ante su afrenta. Se quedó en silencio por un momento, en crisis con sus propios pensamientos, porque quería poder gritar y proteger a Karlāh, pero sabía las consecuencias. Aun así, no podía permitir que la acusaran injustamente. Su mirada se encontró con la de la chica persa por un brevísimo momento, lo suficiente para ver la súplica en sus ojos marrones mientras ella sacudía la cabeza levemente, rogándole que no dijera nada.
—Porque la conozco—, dijo, mirando al rey.
—Ah, ¿Si?
Karlāh cerró los ojos, deseando no haber dicho nada.
—Sí señor. Es dueña de uno de los puestos del mercado, siempre está presente en los séquitos. Es una buena persona, en los paseos que he dado por la ciudad la he visto ayudar a personas necesitadas y ancianos. Esta chica no tiene ninguna motivación para robarle al rey. — Laurenebti cambió su estrategia.
Y pareció funcionar. Muchas personas alrededor conocían a Karlāh, conocían a su padre, comenzaron a murmurar y estar de acuerdo con las palabras de la princesa. Una vez que el rey vio que estaba perdiendo credibilidad, rápidamente se enfureció.
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The Chosen (Camren) - Traducción
FanfictionGanador del Watty 2021 en la categoría Fanfic. Maldita y encarcelada, la princesa Laurenebti I de Giza ha esperado más de 4000 años por su libertad. Su único objetivo: La venganza. Venganza contra Set, el Dios del Caos, por seducirla y tomar su alma...