Un par de meses habían pasado desde que me anunciaron la enfermedad de Korkut, el cuál ahora estaba mucho mejor.
Ya podia verlo nuevamente en el jardín con sus hermanos, eso me daba una calma inexplicable.
Igual mi mente se distraida con otros asuntos, por ejemplo, estaba viendo como iba a evitar la muerte de Raziye y su hermano.
Me daria mucho dolor perder a mi pequeña niña, por lo que les había encargado a los medicos que siempre los estuvieran chequeando.
──No es por presumir.──La voz de Diana me trajo devuelta a la realidad, asi que enfoque mi mirada en ella.──Pero yo si tengo pelo.
──¡Diana!──Dije entre risas, acción que fue inmitada por ella.
──Ahora que tengo toda tu atención.──Diana se acerco a mi y se sento sobre mis piernas.──¿Que ocurre? Estas muy ido.
──Pienso en el futuro.
──No te preocupes por eso Rapunzel, falta mucho como para que empiece la batalla entre príncipes.
──Me preocupa la epidemia de peste que esta por venir.
──Es verdad....La epidemia que acabaria con dos de los hijos de Suleiman.
──Correcto, tengo que salvarlo, pese a que no sean mios, les tengo cariño.
──¿Como el de un padre a sus hijos o cono el de un tío a sus sobrinos?
──Solo se que les tengo cariño, tengo el mismo cariño por todos mis hijos, no haré distinciones entre ellos, ya sabemos como acabo la cosa cuando Suleiman hizo eso.
──Extremadamente bien.──Río Diana mientras colocaba su frente con la mía.──Si yo tuviese un hijo, ¿Lo querrías igual que a sus hermanos?
Cerre los ojos para disfrutar un poco de su tacto, aunque era evidente que había escuchado la pregunte, dude en responder.
Bueno, puede que solo hiciera un poco de diferencia en el trato de los otros son mis otros hijos.
Pero seria mínimo, por que serian los hijos de Diana, ¿Como no iba a preferir siquiera un poco a los hijos de la mujer que amaba por sobre los demás?
──Mal, mal ahí.──Dijo Diana apartandose de mí.──El siquiera que estes pensando en hacer diferencias entre tus hijos es inaceptable, yo si puedo hacer diferencias entre los hijos de las demas consortes y los mios, pero tu no, tú tienes que ser neutral hasta el final.
Asentí, Diana tenía razón, yo ni siquiera debía haber considerado hacer diferencias entre mis hijos.
──Bueno, te dejo, ve a tu reunión de consejo, yo dare vueltas en el jardín.──Dijo la pelirroja mientras desaparecía por los pasillos de mi habitación al tiempo que yo me dirigía donde estaban los pashas.
La reunión duro aproximadamente una hora, discutiendo de como seria la proxima campaña y algunos otros problemas del imperio, ya saben lo típico.
Luego de eso salí de la oficina y camine un poco entre los pasillos.
──Raziye...──La voz de Diana me llamo la atención, por lo que decidí acercarme y esconderme tras una pared para escuchar mejor la conversación.
──Mi mami me quiere.──Aseguro mi pequeña.──Solo que hay veces que yo me porto mal y ella me corrige.
──Aún así hayas rotó todos sus vestidos, no era motivo suficiente como para hacerte eso.
──Mamá es así.──Raziye.──¿Puedo dormir contigo de nuevo esta noche?
──Claro que puedes.──Diana sonrió y se agacho a su altura.──Siempre que te sientas insegura puedes venir conmigo.
Raziye llevo una de sus manos al cabello de Diana y le dijo que era muy bonito, que deseaba tenerlo así cuando sea mayor.
De un momento a otro la pelirroja palideció y cayo al suelo, ocasionando que Raziye gritase y buscase ayuda.
Camine hasta ellas preocupado, ¿Que había pasado?
Mi preocupación incremento cuando Raziye me tomo las manos y me miro, Oh Allah, su ojo izquierdo estaba completamente morado y casi cerrado.
──La señorita Diana se desmayó Papá, tenemos que ayudarla.
Completamente anonado la seguí por los pasillos mientras daba la orden para que un medico viniese a revisarla.
La mujer nos pidio que estuviesemos un rato afuera para ver que era lo que la pelirroja tenía, una vez nos dejo solos, enfoque toda mi atención en Raziye.
──¿Que ocurrio?──Pregunte mientras la cargaba.
──Me caí.──Mintió la pequeña.
──Raziye, yo no te enseñe a mentir, puedes contármelo.
──¿No te enojaras conmigo?
──No.
──Accidentalmente rompí un vestido de mamá, era su favorito, me grito y me bueno, me golpeó.
Solté un suspiro, si, iba a matar a Mukerrem, ¿¡Como siquiera puede atreverse a golpear a un miembro de mi dinastía?
...Eso sono muy clasista y es algo que diría Ayse Hafsa.
Para ser más exacto, ¿¡Como podia golpear a una niña de ese modo?!
Si, ella pasaría una noche en el calabazo a ver si le gustaba.──Felicidades mi Sultán.──Dijo la partera antes de que pudiese seguir conversando con mi pequeña.──La señorita Diana esta embarazada.
Sonreí, creo que era la primera sonrisa real que daba cuando me anunciaban sobre los embarazos, mi felicidad era tanta que hasta reí.
La niña que estaba a mis brazos sonrió igual que yo, era cierto, ella queria una hermana, con algo de suerte su deseo podia hacerse realidad.
──Majestad.──Hablo de nuevo la mujer.──¿Podria dejarme un rato a solas con la sultana Raziye? Su ojo necesita atención urgente.
──Ah si, si, enseguida.──Deje a Raziye con la doctora y espere un rato a fuera.
Sin duda este era un día bastante peculiar.
ESTÁS LEYENDO
¿Ahora soy Suleiman?
Tiểu thuyết Lịch sửMateo, un joven que es considerado el nerd del salón, no tiene vida social, mucho menos amigos, bueno, si hay una, pero no es muy relevante para él. Su único pasatiempo es leer libros e investigar sobre la historia otomana, su favorita admiraba much...